Los partidos de la oposición en Mauritania condenaron ayer la 'bárbara represión' de las manifestaciones organizadas en Nuakchot por jóvenes de la Iniciativa 25 de Febrero para reclamar reformas políticas y sociales.
En una conferencia de prensa en Nuakchot, los diputados de la Coordinación de la Oposición Democrática (COD) lanzaron duras críticas a la actuación policial en la protesta de anoche. 'Lamentamos que el régimen de Mohamed Uld Abdelaziz haya elegido responder a las manifestaciones pacíficas de los jóvenes en favor de reivindicaciones legítimas con la represión bárbara', aseguró el diputado Abderrahmán Uld Mini, presidente del grupo parlamentario de la Agrupación de Fuerzas Democráticas (RFD).
Mini amenazó con utilizar sus poderes como legisladores, 'dado que esta represión es contraria a la ley, para proteger a los manifestantes si el régimen continúa persiguiéndolos'. La manifestación de anoche fue la cuarta de las movilizaciones de protesta programadas por la llamada Iniciativa 25 de Febrero en las que los jóvenes reclamaban cambios en profundidad en la justicia, el empleo, la inflación y la lucha contra la pobreza.
MÉTODOS FRACASADOS
Los miembros de la oposición consideraron que la represión es 'una reproducción de los procedimientos que han fracasado en Túnez, Egipto, Libia, Yemen y Bahrein'. 'La utilización excesiva de la violencia frente a las protestas pacíficas es contraria a la Constitución mauritana y no llevará más que al empeoramiento de la crisis', alertó la nota, difundida al margen de la rueda de prensa. Finalmente, los diputados reclamaron la liberación de los detenidos en estas manifestaciones y la persecución de los responsables de 'las flagrantes violaciones'.
Mini amenazó con utilizar sus poderes como legisladores, 'dado que esta represión es contraria a la ley, para proteger a los manifestantes si el régimen continúa persiguiéndolos'. La manifestación de anoche fue la cuarta de las movilizaciones de protesta programadas por la llamada Iniciativa 25 de Febrero en las que los jóvenes reclamaban cambios en profundidad en la justicia, el empleo, la inflación y la lucha contra la pobreza.
MÉTODOS FRACASADOS
Los miembros de la oposición consideraron que la represión es 'una reproducción de los procedimientos que han fracasado en Túnez, Egipto, Libia, Yemen y Bahrein'. 'La utilización excesiva de la violencia frente a las protestas pacíficas es contraria a la Constitución mauritana y no llevará más que al empeoramiento de la crisis', alertó la nota, difundida al margen de la rueda de prensa. Finalmente, los diputados reclamaron la liberación de los detenidos en estas manifestaciones y la persecución de los responsables de 'las flagrantes violaciones'.
