El Concello de Carballiño realizará una modificación puntual urbanística con el fin de recalificar un espacio público del parque empresarial que figura como zona verde y poder construir un nuevo acceso. Tendrá una longitud aproximada de 200 metros lineales y enlazará la rotonda de acceso al Eixo do Ribeiro con otra que no tiene salida y en cuyo entorno está ubicada la estación de Inspección Técnica de Vehículos (ITV) y una nueva nave, ampliación de la empresa GRI, dedicada a la fabricación de torres eólicas.
El alcalde de Carballiño, Francisco Fumega, confirmaba ayer la intención de realizar dicha modificación puntual urbanística y de solicitar a la Consellería de Industria ayuda financiera para la dotación de este nuevo vial que ha solicitado la Asociación del Área Industrial, a raíz del transito de vehículos que generan ambas empresas, que ahora se ven obligadas a dar un amplio rodeo para salir a la carretera.
Fumega también confirmó que se instalarán en próximos días siete cámaras más de vigilancia en este parque. Una subvención de la Consellería de Industria permite la inversión de 49.000 euros para reforzar el control de esta área empresarial en donde ya hay siete cámaras disponibles y se duplicará su número también a petición de los propios empresarios, con el fin de evitar robos en sus naves y el exceso de velocidad de vehículos. Para este fin, las cámaras instaladas tendrán una conexión directa con las oficinas de la Policía Local.
Por otra parte, Fumega señaló que, con la intención de seguir potenciando el parque empresarial y el viejo polígono industrial, también gestionará ante las distintas compañías que operan en este entorno una mejora en la cobertura de internet, además de continuar con el mantenimiento de viales.
El presidente de la asociación de empresarios, Manuel Carballeda, recordaba al regidor la importancia de esta área que da empleo a 1.050 trabajadores, cuando le planteó las demandas, a las que se comprometió Fumega.
Más de 1.000 trabajadores y 53 empresas
El Área Industrial de Carballiño cuenta en la actualidad con 53 empresas y en estos momentos tan sólo quedan dos pequeñas parcelas disponibles. Los responsables municipales han mostrado en diversas ocasiones su preocupación porque si surgiera alguna empresa que necesitase de más espacio, no se podría atender la demanda.
El alcalde, Francisco Fumega, confirmaba que en breve se remitirá la documentación a SEPES (Entidad Pública Empresarial de Suelo), que depende del Ministerio de Fomento, con el fin de llevar a cabo el proyecto acordado con el concello vecino de Maside.
El proyecto en el que trabajan consiste en la creación del primer parque empresarial masidá, que será al mismo tiempo una ampliación del existente en Carballiño, aprovechando las infraestructuras existentes del área industrial.
