La Residencia de Tempo Libre de Carballiño acoge desde el pasado 22 de diciembre el primer turno de personas mayores beneficiarias del programa Xuntos polo Nadal. Son 61 personas, procedentes de Lugo y A Coruña, que han disfrutado de una estancia de ocio, hasta el día de hoy en que regresan a sus casas, para dar paso a partir del 31 de este mismo mes y hasta el 7 de enero a un segundo turno de otros 87 vecinos de las mismas provincias.
“Me siento triste porque hay que irse. Aquí lo he pasado demasiado bien y volver a la soledad de mi casa es triste”, señalaba Felisa Folgar Liñeira. Los mayores disfrutan de variadas actividades como gimnasia, manualidades, baile, hacen risoterapia, dan largos paseos, juegan a las cartas y realizan visitas a lugares de interés en Carballiño como el Templo da Veracruz o el Gran Balneario.
Xuntos polo Nadal es un programa que organiza la Xunta de Galicia dirigido a mayores de 60 años que se encuentran solos durante estas fiestas y que tiene por objetivo evitar precisamente esa soledad compartiendo una estancia en este centro de vacaciones y facilitando la relación entre los beneficiarios.
Algunos es la primera vez que participan, aunque ya adelantaban que para el próximo año volverán a intentarlo. Otros ya repiten la experiencia, como Felisa Folgan, que ya estuvo el pasado año en la Residencia de Paxón (Nigrán), que junto con la de Carballiño acogen estas Navidades a más de 300 personas que viven solas, entre ellas, Serafín Tobío, el más veterano, que a sus 94 años decía que “me lo estoy pasando muy bien” y añadía que ya conocía Carballiño “porque he venido a los baños hace tres años”.
La villa del Arenteiro, en general, no es desconocida para ellos, y aunque Serafín la conocía por su oferta termal, la mayoría reconocían que era por la Festa do Pulpo.
Los residentes recibían ayer la visita del presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, acompañado de la conselleira de Política Social e Xuventude, Fabiola García; el delegado territorial en Ourense, Gabriel Alén; el vicepresidente de la Diputación, César Fernández; y el alcalde de Carballiño, Francisco Fumega, además de concejales, que fueron recibidos por la directora del centro, Pilar Sotelo.
Alfonso Rueda destacó este programa que sigue vigente después de 20 años, solamente interrumpido durante el año de la pandemia, y apuntó que “moitos repiten porque o pasan ben”. “Os maiores teñen moito que aportar e que dar, só temos que darlles a oportunidade”, indicaba. Apuntaba el presidente que es necesario “pensar na xente maior en soedade non desexada”, y añadía que “Carballiño nestas datas convértese nun nome que xera ilusión”, refiriéndose a las 150 personas que disfrutan de la estancia totalmente gratuita.
César Fernández agradecía en nombre de la Diputación a la Xunta el desarrollo de este programa y Francisco Fumega destacaba esta iniciativa “que saca o mellor do ser humano, a solidaridade”, y agradecía la apuesta de la Xunta por esta residencia, que también genera puestos de trabajo.
La visita concluía con un encuentro con los mayores en la cafetería.
