El descenso paulatino de asociados en los últimos años obliga a la cooperativa Hortoflor a organizar 10 jornadas encaminadas a la captación de nuevos productores. Las jubilaciones y el escaso relevo generacional han provocado una reducción en cinco años de 230 socios a los 180 con los que cuenta en la actualidad. Con las jornadas se pretende informar sobre las posibilidades de formar una cooperativa o adherirse a Hortoflor, que ofrece todo tipo de facilidades como la disponibilidad de la tierra.
La cooperativa Hortoflor, dedicada a la producción de flores y hortalizas, organiza 10 jornadas sobre economía social y cooperativismo, que se desarrollarán a lo largo del mes de octubre, contando con la colaboración de la Consellería de Traballo e Benestar. El objetivo de esta actividad consiste, no sólo en fomentar el cooperativismo, sino que también será una iniciativa mediante la que se pretende captar nuevos asociados o proveedores para Hortoflor.
Esta cooperativa ha ido incre mentando el número de asociados desde su fundación en 1984. Hace cinco años contaba con 230 agricultores, que a partir de ese momento han descendido paulatinamente hasta este año, en que no sobrepasa los 180 socios, aunque también cuenta con 60 proveedores cuyos productos son comercializados por Hortoflor.
El presidente, Carlos Gómez, considera que estas jornadas contribuirán a conseguir más adhesiones. En su opinión, el descenso de los últimos años se debe a las numerosas jubilaciones sin relevo generacional. Siete de las charlas están confirmadas para realizarse en Ourense, Cea, Laza, Trives, San Ciprián das Viñas y Chantada, a través de talleres de empleo, concellos o asociaciones. Las tres restantes todavía se desconoce dónde se impartirán.
Facilidades
Carlos Gómez se refirió a las facilidades que se ofrecen a las personas interesadas en trabajar la tierra, ya que la cooperativa dispone de fincas y, además, cuenta con propietarios dispuestos a arrendarlas. La única difi cultad para ser proveedor es la pequeña inversión que hay que hacer para poner la tierra en producción, aunque existen subvenciones para ello, insistió.
Por otra parte, los agricultores interesados en entrar como asociados están obligados a aportar 4.200 euros de capital social.
La media de superficie por productor ronda los 2.000 metros cuadrados, que se reparten entre las plantaciones al aire libre y los invernaderos.
La cooperativa Hortoflor tiene presencia en Ourense, sur de Lugo, en parte de Pontevedra y en Portugal.
Esta cooperativa ha ido incre mentando el número de asociados desde su fundación en 1984. Hace cinco años contaba con 230 agricultores, que a partir de ese momento han descendido paulatinamente hasta este año, en que no sobrepasa los 180 socios, aunque también cuenta con 60 proveedores cuyos productos son comercializados por Hortoflor.
El presidente, Carlos Gómez, considera que estas jornadas contribuirán a conseguir más adhesiones. En su opinión, el descenso de los últimos años se debe a las numerosas jubilaciones sin relevo generacional. Siete de las charlas están confirmadas para realizarse en Ourense, Cea, Laza, Trives, San Ciprián das Viñas y Chantada, a través de talleres de empleo, concellos o asociaciones. Las tres restantes todavía se desconoce dónde se impartirán.
Facilidades
Carlos Gómez se refirió a las facilidades que se ofrecen a las personas interesadas en trabajar la tierra, ya que la cooperativa dispone de fincas y, además, cuenta con propietarios dispuestos a arrendarlas. La única difi cultad para ser proveedor es la pequeña inversión que hay que hacer para poner la tierra en producción, aunque existen subvenciones para ello, insistió.
Por otra parte, los agricultores interesados en entrar como asociados están obligados a aportar 4.200 euros de capital social.
La media de superficie por productor ronda los 2.000 metros cuadrados, que se reparten entre las plantaciones al aire libre y los invernaderos.
La cooperativa Hortoflor tiene presencia en Ourense, sur de Lugo, en parte de Pontevedra y en Portugal.
