La escultura que Acisclo Manzano dedicó a los emigrantes volverá a ser colocada en un espacio público después de estar más de tres años oculta en una nave municipal. Había sido retirada a raíz de la urbanización de la Praza do Emigrante y ahora se instalará en los jardines de la calle Aldara.
El jardín de la calle Aldara ha sido el lugar elegido por el artista ourensano Acisclo Manzano para reubicar la escultura que había sido retirada de la Praza do Emigrante, coincidiendo con las obras de urbanización del entorno y la construcción del aparcamiento subterráneo.
El escultor mantenía ayer una reunión con el alcalde de Carballiño, Carlos Montes, y el con cejal de Personal y Tráfico, José Antonio Barge, que le ofrecieron la posibilidad de colocarla en su antiguo sitio. Sin embargo, el aspecto de la plaza ha cambiado por completo, tras la última urbanización, por cuyo motivo, Acisclo Manzano optó por su traslado a la zona ajardinada situada al lado de la Praza Maior.
Carlos Montes se mostró totalmente conforme, con lo cual, las dos caras de piedra, que representan un monumento a los emi grantes, se instalarán en próximos días en su nueva ubicación.
Polémica
El hecho de no contar con la obra de Acisclo Manzano en el nuevo diseño de la plaza había suscitado cierta polémica entre la población, teniendo en cuenta que el monumento al emigrante formaba parte del paisaje urbano de la villa desde hacía mucho tiempo.
No obstante, las autoridades locales trasladaron la escultura hasta una nave de propiedad municipal, en donde permanece guardada desde hace más de tres años, coincidiendo con la finalización de las obras de urbanización y la entrada en funcionamiento del aparcamiento subterráneo.
Después de todo este tiempo, finalmente, el artista y las autoridades locales han llegado a un acuerdo, a fin de que el monumento vuelva a ser expuesto en un espacio público, incluso más céntrico que su antigua ubicación.
El escultor mantenía ayer una reunión con el alcalde de Carballiño, Carlos Montes, y el con cejal de Personal y Tráfico, José Antonio Barge, que le ofrecieron la posibilidad de colocarla en su antiguo sitio. Sin embargo, el aspecto de la plaza ha cambiado por completo, tras la última urbanización, por cuyo motivo, Acisclo Manzano optó por su traslado a la zona ajardinada situada al lado de la Praza Maior.
Carlos Montes se mostró totalmente conforme, con lo cual, las dos caras de piedra, que representan un monumento a los emi grantes, se instalarán en próximos días en su nueva ubicación.
Polémica
El hecho de no contar con la obra de Acisclo Manzano en el nuevo diseño de la plaza había suscitado cierta polémica entre la población, teniendo en cuenta que el monumento al emigrante formaba parte del paisaje urbano de la villa desde hacía mucho tiempo.
No obstante, las autoridades locales trasladaron la escultura hasta una nave de propiedad municipal, en donde permanece guardada desde hace más de tres años, coincidiendo con la finalización de las obras de urbanización y la entrada en funcionamiento del aparcamiento subterráneo.
Después de todo este tiempo, finalmente, el artista y las autoridades locales han llegado a un acuerdo, a fin de que el monumento vuelva a ser expuesto en un espacio público, incluso más céntrico que su antigua ubicación.
