Carballiñeses y visitantes se encontraron ayer por la mañana con la agradable sorpresa de un Parque municipal completamente limpio, después de la multitudinaria Festa dos Maiores, que reunió en este paraje natural a cerca de 30.000 personas. El Concello de Carballiño hizo los deberes, adelantándose este año para que los numerosos caminantes y deportistas que cada domingo se acercan al Parque lo hallaran en perfecto estado, a diferencia de anteriores ediciones en las que se esperaba hasta el lunes para la realización de los trabajos.
La Concejalía de Medio Ambiente dispuso de una brigada especial integrada por 10 operarios, que se pusieron manos a la obra a las cinco de la madrugada, prolongando las labores hasta las 10 horas. De esta forma, retiraron en torno a nueve toneladas de basura, cargando por completo uno de los camiones del servicio.
El concejal responsable de este departamento, Bernardo García, declaró que las labores de limpieza resultaron más fáciles que en anteriores ediciones, porque el mismo día de la fiesta, durante las primeras horas de la mañana, un equipo de Medio Ambiente se dedicó a recorrer los puestos de venta, bares y 'pulpeiras', entregando a sus titulares una bolsa con el fin de que depositaran en ella los residuos y así evitar en lo posible el tremendo impacto que ocasionaba la acumulación de la basura por todo el Parque.
Por otra parte, las fuerzas de seguridad que prestaron servicio durante la fiesta también confirmaron que en esta ocasión, y después de muchos años, no actuaron los carteristas y sólo recogieron una denuncia por extravío de la documentación. El anuncio previo de que habría un camión con cámaras, que lograrían primeros planos a 500 metros, pudo ser la causa.
El concejal responsable de este departamento, Bernardo García, declaró que las labores de limpieza resultaron más fáciles que en anteriores ediciones, porque el mismo día de la fiesta, durante las primeras horas de la mañana, un equipo de Medio Ambiente se dedicó a recorrer los puestos de venta, bares y 'pulpeiras', entregando a sus titulares una bolsa con el fin de que depositaran en ella los residuos y así evitar en lo posible el tremendo impacto que ocasionaba la acumulación de la basura por todo el Parque.
Por otra parte, las fuerzas de seguridad que prestaron servicio durante la fiesta también confirmaron que en esta ocasión, y después de muchos años, no actuaron los carteristas y sólo recogieron una denuncia por extravío de la documentación. El anuncio previo de que habría un camión con cámaras, que lograrían primeros planos a 500 metros, pudo ser la causa.
