La Guardia Civil de Carballiño ha imputado al propietario de una floristería del Concello de Forcarei (Pontevedra) por una falta de hurto como sospechoso de sustraer un centro de flores valorado en 80 euros de una tumba del cementerio de Señorín (Carballiño) y revenderlo en la parroquia de San Miguel de Presqueiras (Forcarei).
La denuncia por parte de la familia de un fallecido en Carballiño, de cuya sepultura desaparecieron las flores, motivó la investigación, teniendo en cuenta que las floristerías de la villa afirman que los robos de centros y coronas son habituales en muchos cementerios del municipio desde hace aproximadamente dos años.
El centro que generó la denuncia fue hallado en la iglesia de San Miguel de Presqueiras, por cuyo motivo la Guardia Civil procedió a identificar al propietario de la floristería a la que se le había hecho el encargo, trasladando el informe al Juzgado número uno de Carballiño. Fuentes próximas a la investigación consideran que la falta puede derivar en una sanción económica para el autor.
No obstante, las investigaciones aún no se han dado por zanjadas, ya que la Guardia Civil lo que persigue ahora es comprobar si este hurto tiene que ver con otros muchos que los propietarios de las tiendas de Carballiño afirman que se están produciendo. Ellos puntualizan que los robos coinciden con los funerales y también durante la celebración de Todos los Santos en cementerios como los de Señorín, Arcos, Veiga y Longoseiros, entre otros.
PERJUICIOS
Los dueños de las floristerías opinan que hay más de un profesional de fuera del Concello de Carballiño que se dedica a sustraer los centros y coronas para revenderlos en otros municipios a precios más bajos. En ese sentido, manifestaban su preocupación porque, en su opinión, los perjuicios no son sólo para sus clientes, que se quedan sin las flores, sino también para el sector en aquellos lugares en donde se venden por segunda vez a precios más reducidos.
El centro que generó la denuncia fue hallado en la iglesia de San Miguel de Presqueiras, por cuyo motivo la Guardia Civil procedió a identificar al propietario de la floristería a la que se le había hecho el encargo, trasladando el informe al Juzgado número uno de Carballiño. Fuentes próximas a la investigación consideran que la falta puede derivar en una sanción económica para el autor.
No obstante, las investigaciones aún no se han dado por zanjadas, ya que la Guardia Civil lo que persigue ahora es comprobar si este hurto tiene que ver con otros muchos que los propietarios de las tiendas de Carballiño afirman que se están produciendo. Ellos puntualizan que los robos coinciden con los funerales y también durante la celebración de Todos los Santos en cementerios como los de Señorín, Arcos, Veiga y Longoseiros, entre otros.
PERJUICIOS
Los dueños de las floristerías opinan que hay más de un profesional de fuera del Concello de Carballiño que se dedica a sustraer los centros y coronas para revenderlos en otros municipios a precios más bajos. En ese sentido, manifestaban su preocupación porque, en su opinión, los perjuicios no son sólo para sus clientes, que se quedan sin las flores, sino también para el sector en aquellos lugares en donde se venden por segunda vez a precios más reducidos.
