Los vecinos de Cabanelas acogieron un año más y ya van 22 a los numerosos visitantes que asistieron a la celebración de la Festa do Viño Novo. Ni el frío ni la lluvia echaron para atrás a los incondicionales de esta fiesta, que tuvo lugar bajo carpa en ese entorno paisajístico incomparable de esta aldea carballiñesa con vistas a Pazos de Arenteiro.
Delfín Borrajo es uno de los impulsores de este encuentro de amantes del vino tinto y destacaba de esta nueva edición la importante afluencia de gente desde el mediodía en que se realizaba la degustación con castañas asadas y durante la comida con el habitual menú de esta fiesta gastronómica. Borrajo junto con vecinos, familiares y amigos se encargaron de preparar la comida, a base de "pulpo á feira", "carne ó caldeiro", chorizos y castañas, todo ello regado con el tinto de esta parroquia de Carballiño, que es una de las que están dentro de la Denominación de Origen Ribeiro.
La charanga CLK animó la jornada festiva que se prolongó hasta media tarde, y en la que se consumieron 300 litros de vino; 125 kilos de carne; 30 kilos de chorizos y cerca de 200 kilos de pulpo.
El Concello de Carballiño dispuso con tal motivo de un servicio de transporte gratuito para que los asistentes disfrutaran de esta celebración de exaltación del vino joven sin estar pendientes de conducir sus vehículos, ya que el trayecto entre Carballiño y Cabanelas se realizó aproximadamente cada hora.
Un año más acudieron fieles a la cita vecinos del concello de Bueu, que llegaron a Cabanelas en autobús, en donde la organización ya tenía reservada mesa para 56 comensales. Entre otros asistentes a esta entrañable fiesta estuvieron las autoridades municipales, del gobierno local y de la oposición, además de muchos vecinos del entorno, que en algunos casos optaron por quedarse a comer y que en otros no se resistieron a degustar el vino con castañas antes de abandonar Cabanelas.
La organización corrió a cargo de la asociación de vecinos de esta lcoalidad, contando con la colaboración y apoyo del Concello de Carballiño. En Cabanelas hay 14 bodegas, que en la última cosecha recogieron en torno a los 32.000 kilos de uva con la que se elaboró un vino de gran calidad, según valoraban los asistentes.
