El arquitecto redacta un proyecto que descarta la madera y opta por materiales duraderos

La Xunta rediseña las casas para los gitanos de A Fontela

El poblado está situado en una de las principales entradas de Carballiño. (Foto: MARTIÑO PINAL)
La Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras ha remitido al Concello de Maside el plan parcial urbanístico que permitirá la construcción de viviendas de protección pública destinadas a los habitantes del poblado de A Fontela con vistas a erradicar definitivamente el chabolismo en la zona.
Los responsables autonómicos han variado sustancialmente el proyecto previsto por el anterior bipartito, sustituyendo las casas prefabricadas de madera por edificaciones de planta baja construidas con materiales duraderos. Asimismo, las 25 viviendas y el centro social se distribuirán en tres bloques y no en cinco con patios interiores como se contemplaba con anterioridad. Con esta nueva distribución se abaratarán costes en la dotación de viales y servicios.

Garantizar la duración de las edificaciones utilizando materiales resistentes y el ahorro en la ejecución del proyecto hasta cerca de un millón de euros, son los criterios principales de los que parte ahora la Administración autonómica.

La inversión total que se preveía con el anterior diseño ascendía a 3.670.000 euros, que con los cambios podrá verse reducida en aproximadamente un millón de euros.

TRÁMITES

En consecuencia, el arquitecto municipal, Óscar Gónfer, ultima en estos momentos el nuevo proyecto básico, al mismo tiempo que se ha puesto en marcha el proceso de expropiación de dos fincas afectadas por la urbanización y cuyos propietarios no han sido localizados. Además, el Concello deberá aprobar ahora el plan parcial en pleno, mientras está a la espera de recibir el informe de evaluación medioambiental correspondiente.

Se trata de los últimos trámites que culminarán el próximo mes de noviembre con la convocatoria pública de licitación, con el fin de que las empresas interesadas presenten sus propuestas de ejecución y construcción. Una vez se adjudiquen las obras, el plazo para su terminación será de 24 meses.

La Xunta de Galicia adquirió para ello 37.500 metros cuadrados de terrenos situados en la margen izquierda del enlace de la autovía Carballiño-Maside (dirección Carballiño). No obstante, algunas fincas se vieron afectadas precisamente por el vial, quedando reducida la superficie destinada a la urbanización a 27.840 metros cuadrados.
Previamente, el Concello de Maside recalificó los terrenos rústicos para edificar, siendo catalogados por la Xunta de Galicia como urbanizables no delimitados, es decir, que no disponen de ningún servicio. En consecuencia, fue necesario abordar un plan parcial para desarrollar el proyecto, que en breve será abordado por el pleno.

Las 25 familias de etnia gitana a las que se destinan las viviendas habían manifestado su conformidad para hacer frente a los pagos correspondientes por la compra de la propiedad, al mismo tiempo que mostraron su deseo de abandonar definitivamente las chabolas, que han ido construyendo en un tramo muerto de la antigua carretera de Ourense-Pontevedra.

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