Las autoridades locales y la CIG transmitieron a los trabajadores de la empresa Ataúdes Chao Escudero SA su total apoyo para asesorarles en la búsqueda de nuevos empleos. Los afectados están a la espera de que los propietarios les comuniquen el lunes su decisión sobre el futuro de la fábrica.
Tras el fracaso este pasado martes de la venta de la fábrica Ataúdes Chao Escudero SA, los trabajadores y la CIG dan por cerrada la empresa de forma definitiva. Así se lo expusieron a los miembros de la Corporación de Ribadavia durante la reunión que mantuvieron a raíz de los últimos acontecimientos, que han dejado sin empleo a 15 personas.
Tanto el Concello como la CIG mostraron su total apoyo a los afectados para su asesoramiento y en la búsqueda de otras empresas que puedan facilitarles una salida laboral.
Los trabajadores se mantienen firmes en demandar los dos meses y una paga extra de atrasos, al mismo tiempo que insisten en que la empresa tramite los despidos para cobrar la liquidación. Los propietarios, por su parte, les comunicaron que el próximo lunes probablemente infor men sobre su decisión, barajando como posibilidad acogerse a la Ley Concursal para negociar con ellos y con los acreedores, medida que disgusta a los empleados porque retrasaría los cobros.
Entre tanto, la situación ha generado cierta confusión en Ribadavia debido a la similitud del nombre de esta fábrica con otra también de ataúdes ubicada en la misma localidad. Los propietarios reciben numerosas llamadas de personas interesándose por su empresa, cuando no tiene nada que ver con Ataúdes Chao Escudero, que es la que está en crisis.
Tanto el Concello como la CIG mostraron su total apoyo a los afectados para su asesoramiento y en la búsqueda de otras empresas que puedan facilitarles una salida laboral.
Los trabajadores se mantienen firmes en demandar los dos meses y una paga extra de atrasos, al mismo tiempo que insisten en que la empresa tramite los despidos para cobrar la liquidación. Los propietarios, por su parte, les comunicaron que el próximo lunes probablemente infor men sobre su decisión, barajando como posibilidad acogerse a la Ley Concursal para negociar con ellos y con los acreedores, medida que disgusta a los empleados porque retrasaría los cobros.
Entre tanto, la situación ha generado cierta confusión en Ribadavia debido a la similitud del nombre de esta fábrica con otra también de ataúdes ubicada en la misma localidad. Los propietarios reciben numerosas llamadas de personas interesándose por su empresa, cuando no tiene nada que ver con Ataúdes Chao Escudero, que es la que está en crisis.
