La falta de financiación para cubrir el 30% del presupuesto retrasa la ejecución del proyecto para mejorar la seguridad de las pozas de Melón. La Confederación Hidrográfica estudia alternativas de cofinanciación.
La Confederación Hidrográfica Miño-Sil analizará en estos días las tres opciones de financiación para ejecutar el proyecto de mejora de la seguridad en las pozas de Melón que analizaron el presidente de este organismo, Francisco Fernández Liñares, y el alcalde de Melón, Alberto Pardellas, durante el encuentro man tenido ayer para buscar una solución a la falta de presupuesto.
El proyecto sobrepasa los 480.000 euros, de los que la Confederación Hidrográfica aportará el 70%. Por ese motivo, es necesario buscar un cofinanciador del 30% para acabar con la demora en su ejecución. Las alternativas a estudiar consisten en solicitar apoyo del Ministerio de Medio Ambiente, la firma de una convenio entre Confederación Hidrográfica y Concello para aportar el 30% restante, o contar con otros organismos.
Hasta 1.100 metros de senderos
El proyecto redactado por la Confederación Hidrográfica Miño-Sil para acabar con los accidentes que se producen cada año en las pozas de Melón, algunos de ellos mortales, contempla la creación de 1.100 metros de senderos, la habilitación de 1.000 metros de accesos, una pasarela para cruzar al otro lado de la fervenza y un mirador con una plataforma de 20 metros cuadrados.
El proyecto sobrepasa los 480.000 euros, de los que la Confederación Hidrográfica aportará el 70%. Por ese motivo, es necesario buscar un cofinanciador del 30% para acabar con la demora en su ejecución. Las alternativas a estudiar consisten en solicitar apoyo del Ministerio de Medio Ambiente, la firma de una convenio entre Confederación Hidrográfica y Concello para aportar el 30% restante, o contar con otros organismos.
Hasta 1.100 metros de senderos
El proyecto redactado por la Confederación Hidrográfica Miño-Sil para acabar con los accidentes que se producen cada año en las pozas de Melón, algunos de ellos mortales, contempla la creación de 1.100 metros de senderos, la habilitación de 1.000 metros de accesos, una pasarela para cruzar al otro lado de la fervenza y un mirador con una plataforma de 20 metros cuadrados.
