Cofrentes, con experiencia termal en la Comunidad Valenciana, se reunirá con la Entidade Menor

Un grupo valenciano quiere explotar el balneario de Berán

Bañistas en la vieja piscina. El nuevo establecimiento, cerrado, al fondo. (Foto: MARTIÑO PINAL)
El nuevo balneario de Berán permanece cerrado al público, a la espera de una empresa interesada en su explotación, pero ya hay novedades al respecto.
Hace más de dos años que se podría haber adjudicado, pero no fue posible primero, por enfrentamientos políticos entre PP y PSdeG, y después, por la ausencia de ofertas debido a la crisis económica. No obstante, José María Doval, el nuevo presidente de la Entidade Menor de Berán, se mostró ayer muy optimista porque la situación ha dado un importante giro en estos últimos días, ya que responsables el grupo valenciano Cofrentes se desplazan hoy hasta Berán para presentar una oferta de explotación. Es la primera vez que la Entidade Menor recibe una propuesta real y concreta de una empresa que trabaja dentro del ámbito nacional, en provincias como Alicante y Cáceres, y que está especializada en establecimientos termales.

De esta forma, el presidente confía en llegar a un acuerdo económico para la apertura definitiva de las instalaciones, cuyo funcionamiento constituirá la principal fuente de ingresos para la Entidade Menor, como antes lo había sido el viejo balneario.

Por cierto que José María Doval Mateo ha retirado el candado de las viejas instalaciones termales, dando pasado a numerosos usuarios cada día, pese al letrero que advierte que el balneario está cerrado. El cartel se mantiene a la vista del público, teniendo en cuenta que la Consellería de Sanidade había ordenado el cierre del establecimiento hace aproximadamente dos años por no reunir las condiciones legales vigentes, según señaló el presidente.

La efectividad de estas aguas en el tratamiento de diversas enfermedades de la piel, especialmente de la soriasis, atrae a numerosas personas no sólo del entorno sino de otros lugares de la provincia. 'Onte había no balneario entre 30 e 40 persoas, porque as augas son medicinais e non se pode privar a xente de que as utilice', puntualizaba Doval. Dado que oficialmente no puede ponerse en funcionamiento, son los propios vecinos de Berán los que se encargan cada día de limpiar las instalaciones desde que se retiró el candado en el pasado mes de mayo, poco después de tomar posesión la nueva corporación de la Entidade Menor.

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