Ourense no tempo | Jurando bandera

Septiembre del 2023 será, según mis datos, la primera vez que se celebre en nuestra ciudad una “jura de bandera civil”. Los cambios sociales y principalmente la reorganización que se hizo de los ejércitos al desaparecer la obligatoriedad de prestar el Servicio Militar, abrieron la puerta a que comenzaran a promoverse este tipo de celebraciones. Las organizan las Fuerzas Armadas, siendo un acto sin ningún tipo de connotación; su única razón de ser, es que la ciudadanía que lo desee pueda mostrar el compromiso de lealtad hacia todos sus compatriotas, y su intención de enfocar sus acciones al bien común. No existe ninguna limitación ni de sexo, religión ni ideología. El único requisito es tener la nacionalidad española y haber cumplido los 18 años.

El caso es que ya sabéis que lo que a mí me gusta es recordar nuestra historia, y por ello me he puesto a leer en los viejos periódicos los datos de las juras de bandera que se han celebrado en nuestra ciudad. Me gustaría decir que este es un trabajo definitivo, pero como casi siempre; son muchas las aportaciones que aún se podrían hacer. No dudo que unidades que han estado en nuestra ciudad (los Provinciales de Orense, sin ir más lejos) habrán celebrado juras de bandera o bien en sus acuartelamientos (casa de los Marqueses de Leis, en la calle de la Barrera) o en las calles de la ciudad. Sin embargo, mis datos se limitan al comienzo del siglo XX. 

Concretamente es en 1907 cuando puedo afirmar que los reclutas que ese año se incorporaban al Regimiento Ceriñola realizaban la jura el domingo 13 de abril en el Jardín del Posío. El formato de aquellos años conllevaba que les tomara juramente el obispo de la diócesis y así fue; desde un altar improvisado en el templete de la música, el obispo Illundain presidió el acto.

1910 fue un año singular en lo referente a la jura. La incorporación de las tropas ourensanas a la guerra de África dio pie a que presidiera el acto el capitán general de la 8ª Región Militar y que por primera y única vez (que yo haya podido constatar) la bandera se situara en el Parque de San Lázaro. Los reclutas, arropados por los veteranos, conformaban un total de cuatro compañías, que rematado el acto desfilaron delante de las autoridades; éstas, quizás de manera premonitoria, presidian desde el vestíbulo del colegio de los maristas, que años después fue sede del Gobierno Militar y hoy Subdelegación de Defensa. Con excepción de los desfiles del Corpus y de la colaboración con la procesión del Santo Entierro en la Semana Santa, no se prodigó en exceso el Regimiento en desfilar por la calle del Paseo.

Los años siguientes, por las circunstancias, fueron atípicos. La guerra del Rif trastocó la planificación de los reemplazos y el escenario elegido fue el Campo de Aragón, dentro del Cuartel de San Francisco, hoy patio de la Biblioteca. También es posible que el hecho de que los reclutas fueran muy pocos (22 soldados en 1912) y que hubiera varios actos de jura durante el año lo aconsejaban por comodidad.

En 1913 se incorpora la opción del destacamento del Cumial, que se agregaba a los establecimientos militares de la provincia, con una utilidad que pocos recuerdan: nacía como campo de aviación. Allí, por estar aislado de viviendas y ser unos terrenos muy espaciosos, se podían efectuar prácticas de tiro con mayor seguridad (existió un campo de tiro en Toén, pero en él no conozco instalaciones que permitieran alojar a la tropa). Como decía la prensa local, allí se “fogueaba a los reclutas”; quiero interpretar que se refiere a que se les daban las primeras nociones de armas y se intentaba mejorar su forma física.

Aunque ese año los exploradores de la ciudad (scouts) organizaron allí una jura, hubo que aguardar unos años a que el destacamento se convirtiera en lugar habitual de las juras. El estar apartado de la ciudad era un inconveniente. 

En 1914 se estrenaba la céntrica Alameda como escenario de la jura y, a pesar de que para la mayoría de ourensanos era la mejor ubicación, en los años siguientes se siguió celebrando en el Cuartel. La autoridad militar en aquellos tiempos estaba más pendiente de otras cosas. Incluso en 1918 se llegó a indicar a nivel nacional que se efectuara en los acuartelamientos. 

Desde abril de 1920 y hasta junio del 31, la unidad que teníamos acuartelada era el Batallón de Cazadores de Mérida 3, y ellos se encargaban de las juras, que ya se realizaban para cada remplazo o llamamiento. Hasta el 44 tuvimos que esperar que llegara el Regimiento Zamora 8 (pendiente estoy de poder terminar la relación de fuerzas que en la ciudad tuvimos). Al poco de llegar el Zamora, fue el Cumial el lugar elegido para las juras, y por los años a los que me refiero aún están entre nosotros muchísimos ourensanos que lo recuerdan. La última debió de ser en el 67 o 68.

El último paso fue el de realizar las juras en los centros de instrucción y reclutamiento (CIR), por cercanía El CIR 13, primero en Parga (Lugo) y después en Figueirido (Pontevedra), era el que acogía a los gallegos y muchos como yo, los nacidos en los 60, comenzaron su periplo militar en él; después teníamos otro periodo de instrucción en el Cumial, pero la jura ya no se volvió a realizar en Ourense, hasta… 

Los cambios en el formato del Ejército han dado lugar a que cada vez sea más habitual el formato de la jura civil, que en estos días, encuadrada en los actos del homenaje en recuerdo de la presencia del Regimiento Zamora 8 en la ciudad, podremos celebrar el sábado día 23 de septiembre a las 19,00 horas en la plaza de la Biblioteca Provincial, antiguo Campo de Aragón del cuartel de San Francisco.