SINIESTROS DE TRáFICO

Los accidentes graves consolidan su tendencia a la baja durante 2015

01.07.15.CASTRLO.DO.VAL.OU-113.ACCIDENTE.MORTAL.CAMION.
photo_camera El accidente mortal ocurrido en Castrelo do Val el 1 de julio.

La Subsector de Tráfico de Guardia Civil considera clave "la implicación de los agentes" en las labores de vigilancia de las carreteras

El verano, la época más funesta para los accidentes de tráfico graves o mortales, no ha roto la tendencia a la baja de los primeros meses del año en los que, hasta mediados de abril, Ourense junto a Palencia y Teruel figuraban como las únicas provincias sin fallecidos.
 Pese a que aún queda poco más de tres meses para finalizar 2015, la provincia registró seis víctimas mortales -a 24 horas del siniestro-, siete menos que en el mismo periodo que el pasado año (bajaron un 54%). Además, hubo menos  heridos graves, dato numérico que, según explica el teniente del Subsector de Tráfico de Ourense, Norberto Aser González Trigo, marcan la tendencia a la hora de analizar la siniestralidad viaria en un territorio.


Además, el pasado año concluyó con 86 personas lesionadas de gravedad, la cifra menos acusada desde que existe estadística sobre esta materia. En los últimos 15 años, hubo periodos de hasta 56 muertos y 278 heridos tal como ocurrió en 2003. Pues bien, los ocho primeros meses de 2015 sumaron 42 heridos graves.


El teniente del Subsector está satisfecho porque el descenso no se trata de algo anecdótico o puntual. "Las valoraciones estadísticas hay que hacerlas a cinco años vista; en 2014 hubo muchos menos heridos graves y un pequeño repunte de accidente mortales debido a infortunios pero desde 2008 observamos una tendencia muy buena de descenso", comenta González Trigo.


En Ourense, a su juicio, ha dado resultado el trabajo realizado por la Guardia Civil en la extensa red de carreteras de la provincia que vigilan (8.632 kilómetros). "La variable vigilancia/control, que es indispensable y que ha contado con una gran implicación de los agentes, se ha incrementado y ha sido más eficiente", valora. Sin olvidar -añade- las medidas legislativas implementadas para reducir los accidentes: carné por puntos o la reforma del Código Penal que tipificó como delitos conductas negligentes al volante.


En cuanto al estado de conservación de las carreteras en la provincia, la Guardia Civil lo considera "bueno". Los tramos con problemas en el firme o aquellos puntos negros detectados son comunicados a los titulares de las vías y van siendo "parcheados". Todo ello tiendo en cuenta, enfatiza el teniente, que "la dispersión poblacional en Ourense es importante y "hay muchas carreteras y caminos que mantener".
El mayor problema en la seguridad vial ourensana radica, tal como reconoce el jefe provincial de Tráfico, David Llorente, es "el envejecimiento de la población conductora". En la provincia, hay un censo de 190.000 conductores y 30.000 son mayores de 65 años (el 15,7%).


Nueve de los 18 muertos de 2014 estaba en ese rango y todos, salvo uno, superaba los 75. En 2015, uno de los fallecidos tenía 80 años (accidente del 20 de julio en la N-120 -Rubiá-. La salida de vía  con posterior despeñamiento que le costó la vida al conductor se debió, según determinó el atestado policial, a dos posibles causas: conducción distraída o sueño.


La Jefatura de Tráfico elaboró un protocolo con los 17 responsables de los psicotécnicos de la provincia con el fin de que sirva de herramienta para perfeccionar el diagnóstico de las capacidades y aptitudes de los conductores mayores, así como afinar más en la previsión de cómo evolucionarán de cara a renovar antes.

Los forenses detectan en muchos de los fallecidos más mayores la  presencia de ansiolíticos en rango terapéutico, dentro de las dosis que se corresponden con la prescripción médica.
Colectivo como Stop Accidentes son partidarios de  "un cambio legislativo" para endurecer las condiciones de renovación, con la posibilidad de acceso al historial médico. "Tras el psicotécnico se ocultan muchas veces patologías", dice Benito Bouzada.


La Diputación, la Asociación Provincial de Autoescolas y la Jefatura Provincial de Tráfico promovieron conjuntamente una campaña de educación viaria dirigida preferentemente a los mayores de 65 años  para reciclar la formación viaria de los conductores del rural tanto en lo relacionado con la nueva normativa de tráfico como con la recuperación de los puntos perdidos del carné. 
 

Te puede interesar