Una multa de 360 euros es la pena que ayer aceptó en el Juzgado de lo Penal número 2 de Ourense un acusado de un delito contra la seguridad del tráfico, cometido cuando caminaba por la calle. Y es que la fiscal atribuía al procesado, José María S.C., unos hechos ocurridos en la madrugada del 7 de agosto de 2003 en la ciudad.
Según la acusación pública, el hombre caminaba por la calle Progreso y se puso a arrojar siete contenedores de basura al centro de la calzada, poniendo en riesgo a los vehículos que pudieran circular por la misma a esa hora.
El acusado, que fue sorprendido por la Policía Local cuando tiraba el último contenedor, ya había sido condenado con anterioridad por un delito contra la seguridad del tráfico. En aquella ocasión la pena impuesta era una multa y la prohibición de conducir vehículos a motor durante un año, condena que quedó extinguida poco antes de los hechos por los que fue juzgado ayer. En este último caso, la fiscal solicitaba inicialmente una pena de 1.440 euros, que finalmente quedaron en 360 tras el acuerdo entre las partes.
El acusado, que fue sorprendido por la Policía Local cuando tiraba el último contenedor, ya había sido condenado con anterioridad por un delito contra la seguridad del tráfico. En aquella ocasión la pena impuesta era una multa y la prohibición de conducir vehículos a motor durante un año, condena que quedó extinguida poco antes de los hechos por los que fue juzgado ayer. En este último caso, la fiscal solicitaba inicialmente una pena de 1.440 euros, que finalmente quedaron en 360 tras el acuerdo entre las partes.
