El sindicato Xóvenes Agricultores entiende que los viticultores de las denominaciones de origen de O Ribeiro, Monterrei y Valdeorras perderán 30 millones de euros con la OCM del vino. El Ministerio de Agricultura lo niega.
La reforma de la Organización Común de Mercado vitivinícola (OCM) enfrenta al sindicato Xóvenes Agricultores y el Ministerio de Agricultura. Los primeros afirmaron ayer en una rueda de prensa desarrollada en el salón de actos de la Confederación de Empresarios (CEO) que los viticultores amparados por las denominaciones de origen de Valdeorras, Ribeiro y Monterrei perderán más de 30.000.000 euros nada más entrar en vigor la reforma en el 2, só en concepto de dereitos históricos, ós que haberá que engadir as posibles repercusións negativas das novas normas de etiquetados, aseguró el sindicalista Francisco Bello.
Para el sindicalista, la pérdida de los derechos es como la expropiación forzosa de unha parcela pero sin percibir compesación económica, añadió.
La OCM, según el sindicato, desprotege las denominaciones de origen y bajará los precios de la uva.
Este panorama no lo comparte el Ministerio de Agricultura, que aseguraba ayer en un escrito que la reforma permite que los viticultores reciban, por primera vez, ayudas directas y posibilita el reconocimiento de los consejos reguladores como organizaciones interprofesionales.
Según el Ministerio, los derechos históricos del viñedo con la antigua OCM desaparecerían en el año 2010. Esto es algo que no se está diciendo y con la reforma se mantienen, al menos, ocho años más, recuerdan, añadiendo que además se podrán mantener los derechos de plantación en las denominaciones de origen.
El sindicato solicitó firmeza a la Consellería de Medio Rural en la negociación de ayudas para la promoción de la viticultura. Desde el Ministerio se asegura que se destinarán más de 32 millones de euros a la promoción del vino y estabilizar la producción.
Para el sindicalista, la pérdida de los derechos es como la expropiación forzosa de unha parcela pero sin percibir compesación económica, añadió.
La OCM, según el sindicato, desprotege las denominaciones de origen y bajará los precios de la uva.
Este panorama no lo comparte el Ministerio de Agricultura, que aseguraba ayer en un escrito que la reforma permite que los viticultores reciban, por primera vez, ayudas directas y posibilita el reconocimiento de los consejos reguladores como organizaciones interprofesionales.
Según el Ministerio, los derechos históricos del viñedo con la antigua OCM desaparecerían en el año 2010. Esto es algo que no se está diciendo y con la reforma se mantienen, al menos, ocho años más, recuerdan, añadiendo que además se podrán mantener los derechos de plantación en las denominaciones de origen.
El sindicato solicitó firmeza a la Consellería de Medio Rural en la negociación de ayudas para la promoción de la viticultura. Desde el Ministerio se asegura que se destinarán más de 32 millones de euros a la promoción del vino y estabilizar la producción.
