Todo apunta a que alguien prendió fuego intencionadamente a unos colchones en sus puertas
La sede de la Asociación de Constructores de Ourense, emplazada en la calle Padilla de la ciudad (junto a la plaza de San Marcial, en el Casco Vello), fue el escenario de un incendio que se saldó con cuantiosos daños materiales. Los hechos ocurrieron la pasada madrugada, pasadas las cuatro de la madrugada, cuando un particular dio la voz de alerta a los bomberos, que se personaron con una unidad para sofocar las llamas.
El origen del fuego se situó en dos montones de mobiliario doméstico, a ambos lados de la puerta de entrada a la sede de los empresarios. A la derecha, un sofá cama y varias mesitas de noche. A la izquierda, nueve colchones y, además, tres contenedores (de residuos orgánicos, plástico y papel). Todo ello reducido a cenizas. Según las primeras estimaciones, "el incendio fue claramente intencionado. Los colchones no arden por sí solos", apuntaron desde el cuerpo de bomberos, quienes tardaron poco menos de una hora en aminorar el fuego. Además, "es muy sospechoso que los dos montones comenzasen a arder a la vez", indicó el gerente del colectivo empresarial, Cesáreo Fernández Ríos.
Estallaron los cristales
El fuego, que se inició en la vía pública, perpetró en el interior de las instalaciones a través de las ventanas. "Los colchones tienen gran poder calorífico", dijeron los bomberos, por eso estallaron los cristales, dejando entrar las llamas.
Desde primera hora de la mañana y hasta el mediodía, los trabajadores de la asociación permanecieron en el edificio recogiendo escombros en el vestíbulo del edificio. A esperas de que el perito tase los daños ocasionados, el gerente adelantó que "puede ser solo superficial o que el fuego haya causado más estragos de los aparentes", refiriéndose, entre otras, a la red eléctrica. A simple vista, el mobiliario del recibidor, así como la documentación y todo el material de oficina (ordenadores, fotocopiadora, guillotina, archivadores, ...) fueron arrasados en el incidente. Además, el humo y el hollín afectó a las tres plantas superiores del edificio, inaugurado en enero de 2005.También se desplazó una dotación desde la Comisaría de Policía, que tomó pruebas para investigar el origen del fuego.
El caso está ahora en manos de la Policía Científica, que será la que comprobará si fue provocado o no. Los agentes se valerán de las grabaciones de las cámaras de seguridad de los locales colindantes. "Gracias a que los bomberos llegaron rápido, sino hubiese ardido toda el edificio empresarial, que es prácticamente de madera, y posiblemente toda la manzana", apostilló el presidente de los constructores, Eligio Nieto.
