El Concello de Ourense celebró ayer tres de sus juntas de área, encuentros en los que la oposición puso sobre la mesa diferentes cuestiones que le interesan pero sobre las que no obtienen más que silencio por parte del gobierno municipal, una crítica que se viene repitiendo reiteradamente por parte de todos los grupos políticos.
Pese a esto, los representantes de las formaciones preguntaron por cómo está por ejemplo la tramitación de la ordenanza de terrazas, preocupando al BNG que no se estén cumpliendo las distancias que se fijan ahora en la instrucción aprobada para la regulación de veladores mientras no haya una norma firme. El PSOE, por su parte, exige que la Policía Local emita también un informe sobre la futura ordenanza. Intuyen los socialistas que el gobierno no está por la labor al entender que su anteproyecto se vendría abajo.
El grupo del PSOE se interesó también por la situación de los mupis, vacíos de contenido y colocados en las calles pese a que el alcalde de la ciudad, Gonzalo Pérez Jácome, prometió su retirada de la vía pública. Los socialistas entienden que no existen fondos para quitarlos, pidiendo que su gestión vuelva a salir a concurso.
Mientras, el BNG también quiso saber en qué punto está el segundo plan de ayuda a los autónomos, que según el compromiso dado por el gobierno local, se destinará a comercio y hostelería. Los nacionalistas piden que se aceleren los trámites para poder habilitar la línea de subvenciones lo antes posible ante la complicada situación que viven estos sectores.
