Los bares bajaron la persiana obligados a las once y los clientes coparon callejuelas y plazas. Botellones y alguna pelea dispersa ocuparon el tiempo. Pero esto no es ni Madrid ni Salamanca.
Ourense salió a la calle en tromba , aunque no se produjeron aglomeraciones como en Salamanca, Madrid o Barcelona. Las imágenes que se repitieron en otras partes de España fueron aquí un poco…
Debes estar registrado para leer este contenido
Si ya tienes una cuenta, inicia sesión
star
Podrás registrarte con tu correo. Es rápido y gratis.
¿Necesitas ayuda? Envíanos un email a [email protected].