Las tres pozas de agua mineromedicinal junto al Miño atraen a diario una media de 70 bañistas

Cenlle estrena la zona termal ideada para el turismo estival

Las pozas, que serán inauguradas oficialmente el jueves, ya atraen a numerosos bañistas. (Foto: FOTOS: XESÚS FARIÑAS )
El Concello de Cenlle prevé inaugurar de forma oficial su nueva área termal el próximo jueves. No obstante, hace algo más de un mes que ya están abiertas al público las instalaciones, que constan de tres pozas de aguas mineromedicinales, vestuarios, cafetería y zonas ajardinadas, todo ello enmarcado en las orillas del Miño y en un amplio paraje natural que se extiende hasta el cercano Balneario de Laias.
El alcalde de Cenlle, Gabriel Alén, expresaba su satisfacción por lo concurridas que están las pozas, que están siendo utilizadas por una media diaria de 70 bañistas, siendo mayor la afluencia durante los fines de semana. De entrada libre y gratuita, la mayoría de los usuarios proceden del mismo municipio, de la cercana ciudad de Ourense y de la comarca de Carballiño.

'Non teñen nada que ver coas termas de Ourense porque nestas a auga está a 26 grados, por eso trátase dunha oferta de ocio estival', indicaba el regidor.

Su mantenimiento no supone una carga para el Concello, porque se financia con los beneficios obtenidos en la cafetería. Las autoridades municipales proyectan adjudicar la gestión de estas instalaciones el próximo año, además de la organización de rutas guiadas (hay dos señalizadas que suman 45 kilómetros) y de la dirección del futuro circuito de orientación deportiva. Este circuito ha sido aprobado por la Xunta y su adjudicación está prevista a partir de septiembre, contemplado una inversión inicial de 8.000 euros.


ADJUDICACIÓN

'Agora fixemos unha contratación temporal porque queríamos abrir a zona termal, pero a nosa intención está en sacar a concurso toda a oferta de ocio, tanto as piscinas como as rutas do Avia e do Miño e o circuito de orientación deportiva', matizó Gabriel Alén.

El área termal supuso una inversión de 110.000 euros y se financió con fondos europeos del Agader por un importe de 80.000 euros, además de los 30.000 aportados por la Diputación provincial, que en este caso también asumió la dirección de obra y realización del proyecto.

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