La legislación vigente obliga a aumentar las plazas públicas ofertadas en Pereiro de Aguiar (debido al incremento de población infantil en edad de escolarización en este Concello) pero la 'falta de espacio' para abrir nuevas aulas en el colegio público Ben Cho Shey llevó a la Xunta a solucionar la situación mediante conciertos con los centros privados Guillelme Brown y Miraflores, como ya anunció este periódico el pasado mes de julio.
Estos colegios recibirán una subvención de las arcas autonómicas superior a los 138.000 euros (a razón de 46.000 euros anuales por aula concertada) para escolarizar a los alumnos del Concello, aunque los padres tendrán igualmente que costear por su cuenta el comedor y el transporte escolar. La jefa territorial de Educación, Marisol Díaz, insistió en que 'se está a cumprir coa normativa vixente' y justificó la agrupación de alumnado por 'criterios organizativos'.
La medida adoptada tendrá serias consecuencias educativas para el Ben Cho Shey -según advierten sindicatos y Anpa-, ya que se agrupará a los alumnos de distintas edades en una misma aula, a la vez que se evita la contratación de un profesor (cuyo ahorro es de 30.000 euros). Durante el transcurso de una manifestación convocada por la Anpa frente a la delegación de la Xunta con pupitres y material escolar, los padres denunciaron lo que consideran 'unha perda na calidade do ensino' y exigieron la ampliación urgente de las instalaciones, debido 'ó incremento significativo de matrículas nos últimos catro anos, que pasaron de 123 a 212'.
Desde el sindicato CC.OO. también se criticó la política educativa de la Xunta por 'destinar cartos para os centros privados e recortalos para os públicos', pues este curso se reducirá el número de profesorado en la provincia, pasando de los 3.269 del pasado año a los 3.019 (250 menos), según señaló el secretario general de la sección de Ensino de este sindicato, Alex Portela. Sin embargo, la reducción de profesorado contrasta con el repunte de las matriculaciones, que pasaron de las 12.000 del pasado curso a las 12.500, añadió Portela, aunque la Consellería se negó a proporcionar las cifras oficiales. Asmismo, señalaron que cuando se aprobaron los conciertos con el Guillelme Brown contaba únicamente con cinco alumnos matriculados, mientras que el colegio Miraflores, propiedad de la orden de las Esclavas de la Santísima Eucaristía y de la Madre de Dios, tenía a siete matriculados.
La medida adoptada tendrá serias consecuencias educativas para el Ben Cho Shey -según advierten sindicatos y Anpa-, ya que se agrupará a los alumnos de distintas edades en una misma aula, a la vez que se evita la contratación de un profesor (cuyo ahorro es de 30.000 euros). Durante el transcurso de una manifestación convocada por la Anpa frente a la delegación de la Xunta con pupitres y material escolar, los padres denunciaron lo que consideran 'unha perda na calidade do ensino' y exigieron la ampliación urgente de las instalaciones, debido 'ó incremento significativo de matrículas nos últimos catro anos, que pasaron de 123 a 212'.
Desde el sindicato CC.OO. también se criticó la política educativa de la Xunta por 'destinar cartos para os centros privados e recortalos para os públicos', pues este curso se reducirá el número de profesorado en la provincia, pasando de los 3.269 del pasado año a los 3.019 (250 menos), según señaló el secretario general de la sección de Ensino de este sindicato, Alex Portela. Sin embargo, la reducción de profesorado contrasta con el repunte de las matriculaciones, que pasaron de las 12.000 del pasado curso a las 12.500, añadió Portela, aunque la Consellería se negó a proporcionar las cifras oficiales. Asmismo, señalaron que cuando se aprobaron los conciertos con el Guillelme Brown contaba únicamente con cinco alumnos matriculados, mientras que el colegio Miraflores, propiedad de la orden de las Esclavas de la Santísima Eucaristía y de la Madre de Dios, tenía a siete matriculados.
