El Laboratorio Galego de Consumo ha iniciado el análisis de veinte artículos para niñs menores de siete años.
El Instituto Galego de Consumo ha iniciado la campaña de información y control de venta de disfraces y máscaras con motivo de la temporada de Entroido en la que nos encontramos. Para ello, este organismo ha intensificado las inspecciones en establecimientos y la toma de muestra de productos para su análisis en el Laboratorio Galego de Consumo.
Esta campaña, centrada en los artículos destinados a los niños, se ha iniciado con el análisis de una primera partida de veinte artículos destinados a menores de siete años, entre los que se encuentran disfraces, máscaras, antifaces, pelucas y barbas, a los que la normativa considera dentro de la categoría de juguetes.
En el caso de que detecte algún indicio de riego en alguno de los productos analizados, el Instituto Galego de Consumo notificará a la Rede de Alerta de Produtos de Consumo Non Alimenticios (Siri), un sistema de información que funciona a nivel nacional y europeo con el objetivo de tomar medidas de reacción, como la inmovilización del producto, la retirada del mercado o la modificación de aquellas características que lo convierten en inseguro.
En la campaña puesta en marcha durante el Entroido de 2013, el Instituto Galego de Consumo informó a la Siri de 15 productos que no cumplían con los requisitos de seguridad establecidos por la normativa tras el análisis de un total de 38 muestras en el laboratorio.
El Instituto de Consumo recomienda que los disfraces infantiles no lleven cordones en la zona del cuello, ni botones o componentes peligrosos que puedan provocar asfixia. También se recomienda la elección de disfraces hechos con materiales no inflamables. n
