El juez portugués encargado de la operación antidroga llevada a cabo el pasado sábado en el distrito de Beja (Alentejo) aún no permitió a la familia de Lino Freire Díaz el reconocimiento de su cadáver. El presunto narcotraficante falleció cuando intentaba huir de las fuerzas de seguridad, que intervinieron 2.800 kilos de hachís tras la detención de nueve hombres, seis de nacionalidad portuguesa y tres gallegos (dos ourensanos y un pontevedrés).
El juez no permitió el reconocimiento al no estar cursada una solicitud de repatriación de los restos y al considerar que la operación continúa abierta. La Policía Judiciaria continúa peinando la zona ante la sospecha de que en el traslado del hachís participaron más personas de las detenidas, que podría haber escapado por el monte.
Mientras, la familia del fallecido se queja de la falta de información por parte del Ministerio del Interior sobre lo sucedido.
Mientras, la familia del fallecido se queja de la falta de información por parte del Ministerio del Interior sobre lo sucedido.
