El cadáver recuperado a última hora de la noche del miércoles en el río Lor, en el municipio lucense de Quiroga, concuerda con el del joven rumano R.G., de 29 años y vecino de Ourense, que desapareció hace unas semanas tras darse a la fuga a pie cuando agentes de la Guardia Civil le pidieron que se identificase en un control de carretera en la N-120, cerca del lugar en el que apareció el cuerpo.
Fuentes policiales informaron que, a pesar del avanzado estado de descomposición en el que se encuentra el cuerpo, la constitución del cadáver concuerda con la del joven rumano, al igual que la ropa que llevaba puesta e incluso el teléfono móvil, que también fue recuperado. Según las mismas fuentes, en el cadáver no se advertían signos aparentes de violencia.
Para completar la identificación del cadáver se han solicitado pruebas de ADN, pero todavía tardarán un tiempo, dado que el familiar más próximo del desaparecido reside en Segovia. También se tomaron muestras de las huellas dactilares, pero el estado en el que se encontraba el cadáver no permitió cotejarlas, por lo que han sido enviadas a Madrid para tratar de verificarlas.
El cuerpo sin vida fue localizado en torno a las diez de la noche, hora en la que la Guardia Civil pidió a la central de coordinación de emergencias del 112 medios para rescatar el cuerpo, dado que no se podía llegar al cadáver sin cruzar el río Lor.
La central de emergencias movilizó a los bomberos de Monforte y las agrupaciones de voluntarios de Protección Civil de Quiroga y Ribas de Sil, aunque fueron finalmente los de O Barco quienes rescataron el cadáver con ayuda de una embarcación.
Para completar la identificación del cadáver se han solicitado pruebas de ADN, pero todavía tardarán un tiempo, dado que el familiar más próximo del desaparecido reside en Segovia. También se tomaron muestras de las huellas dactilares, pero el estado en el que se encontraba el cadáver no permitió cotejarlas, por lo que han sido enviadas a Madrid para tratar de verificarlas.
El cuerpo sin vida fue localizado en torno a las diez de la noche, hora en la que la Guardia Civil pidió a la central de coordinación de emergencias del 112 medios para rescatar el cuerpo, dado que no se podía llegar al cadáver sin cruzar el río Lor.
La central de emergencias movilizó a los bomberos de Monforte y las agrupaciones de voluntarios de Protección Civil de Quiroga y Ribas de Sil, aunque fueron finalmente los de O Barco quienes rescataron el cadáver con ayuda de una embarcación.
