Imanol Arias se convirtió en el segundo premiado con el galardón Ourense Mundo Enteiro, que instauró la Diputación para las personas que mantienen vínculos con la provincia. El actor agradeció el reconocimiento en la cena donde se le entregó, y a la que acudió el esperado Miguel Angel Silvestre, el Duque.
Imanol Arias se convirtió ayer en el segundo embajador de la provincia, tras Paolo Vasile, al recoger el premio Ourense Mundo Enteiro, instaurado el año pasado por la Diputación para honrar a aquellas personas que mantienen y fomentan vínculos ourensanos.
Por la mañana, acompañado por el presidente de la Diputación, José Luis Baltar; el consejero delegado de Telecinco, Paolo Vasile (que recibió el galardón en 2007), así como por el director general de contenidos de esa cadena, Manuel Villanueva, el actor agradeció el galardón que le fue entregado por la noche en una fiesta en el hotel-monumento de San Clodio. Va a ser muy difícil estar a la altura del romano (en alusión a Vasile) y me emociona especialmente este reconocimiento, dijo.
Imanol Arias se remontó a su infancia en Ermua para explicar su ourensanismo, estrechamente vinculado a la emigración. Mi padre trabajaba en la industria y los ourensanos también. Ellos fueron los que introdujeron en la década de los 50 el amor por la producción de comida, criando sus propias gallinas y cultivando tomates buenísimos, de ahí su relación con personas oriundas de Allariz o Xinzo. Destacó como capítulo fundamental el asesinato del concejal del PP Miguel Ángel Blanco, cuya familia procede de A Merca y siempre estuvo muy unida a la del actor. Aquel suceso fue terrible, pero estoy convencido de que aquella reacción tan inmediata se produjo porque los gallegos dijeron basta, así se tocó de lleno la fibra sensible.
Imanol Arias, que ya recibió un premio en el Festival de Cine hace tres años, se declaró or gulloso de que los sonidos, olores y sabores de Ourense no me resultan desconocidos y reiteró su agradecimiento. El presidente de la Diputación, José Luis Baltar, explicó que Ourense es una provincia pequeña, pobre y que no ha alcanzado aún cotas de desarrollo, pero que cuenta con un capital humano extraordinario, idéntico calificativo con el que se refirió a Arias.
Por la noche, en el hotel-monumento de San Clodio, se desaró la fiesta con la presencia de Miguel Angel Silvestre, el actor estelar de la seria Sin tetas no hay paraíso.
Por la mañana, acompañado por el presidente de la Diputación, José Luis Baltar; el consejero delegado de Telecinco, Paolo Vasile (que recibió el galardón en 2007), así como por el director general de contenidos de esa cadena, Manuel Villanueva, el actor agradeció el galardón que le fue entregado por la noche en una fiesta en el hotel-monumento de San Clodio. Va a ser muy difícil estar a la altura del romano (en alusión a Vasile) y me emociona especialmente este reconocimiento, dijo.
Imanol Arias se remontó a su infancia en Ermua para explicar su ourensanismo, estrechamente vinculado a la emigración. Mi padre trabajaba en la industria y los ourensanos también. Ellos fueron los que introdujeron en la década de los 50 el amor por la producción de comida, criando sus propias gallinas y cultivando tomates buenísimos, de ahí su relación con personas oriundas de Allariz o Xinzo. Destacó como capítulo fundamental el asesinato del concejal del PP Miguel Ángel Blanco, cuya familia procede de A Merca y siempre estuvo muy unida a la del actor. Aquel suceso fue terrible, pero estoy convencido de que aquella reacción tan inmediata se produjo porque los gallegos dijeron basta, así se tocó de lleno la fibra sensible.
Imanol Arias, que ya recibió un premio en el Festival de Cine hace tres años, se declaró or gulloso de que los sonidos, olores y sabores de Ourense no me resultan desconocidos y reiteró su agradecimiento. El presidente de la Diputación, José Luis Baltar, explicó que Ourense es una provincia pequeña, pobre y que no ha alcanzado aún cotas de desarrollo, pero que cuenta con un capital humano extraordinario, idéntico calificativo con el que se refirió a Arias.
Por la noche, en el hotel-monumento de San Clodio, se desaró la fiesta con la presencia de Miguel Angel Silvestre, el actor estelar de la seria Sin tetas no hay paraíso.
