Dos vecinos de la ciudad, J.E.C., de 54 años y E.R.F., de 45, ingresaron ayer en prisión como presuntos autores de un delito de tráfico de drogas. Los arrestos se produjeron dentro de una operación antidroga que inició el pasado mes de marzo el Cuerpo Nacional de Policía y finalizó con la incautación de 750 gramos de cocaína y 2,5 kilos de hachís. Dentro de la investigación fueron detenidas otras tres personas, una de ellas en Lugo, aunque las tres quedaron en libertad con cargos tras prestar declaración en el Juzgado.
La operación se inició el pasado mes de marzo después de que los agentes constataran que tres personas domiciliadas en la ciudad estaban presuntamente vendiendo hachís y cocaína a pequeña escala en diferentes puntos del casco urbano. El Grupo de Estupefacientes de la Comisaría estableció el correspondiente dispositivo de vigilancia e interceptó en Lugo a un hombre, J.F.G., de 33 años, tras adquirir droga (12 gramos de cocaína) a uno de los tres ourensanos. Acto seguido, los agentes estrecharon el cerco en torno a las personas que supuestamente estaban vendiendo la droga y las pesquisas dieron fruto el pasado día 7 de mayo cuando los agentes interceptaron en el centro de la ciudad a un hombre, F.A.F., de 32 años, portando 2,5 kilos de hachís. Su declaración permitió a los agentes de Estupefacientes determinar que el grupo funcionaba de forma organizada y que uno de sus miembros, J.E.C., iba a trasladarse el pasado 28 de junio a Pontevedra para adquirir más droga.
Ese día, los agentes establecieron un amplio dispositivo a lo largo de las carreteras N-120 (Ourense-Vigo) y la N-542 (Ourense-Pontevedra), así como la autovía Rías Baixas, para localizar el vehículo en que se desplazaba el presunto narcotraficante. La vigilancia dio fruto a las 20.00 horas en el acceso centro, donde los agentes localizaron el automóvil, interviniendo a su conductor 60 gramos de cocaína, que llevaba ocultos entre sus ropas y 1.200 euros en efectivo.
En un posterior registro de cuatro viviendas, los policías decomisaron 700 gamos de cocaína, cuatro básculas de precisión, 14 teléfonos móviles, dos pistolas (una real y otra simulada) y diverso material para manipular sustancias estupefacientes. Los detenidos carecen de antecedentes por tráfico de drogas.
Ese día, los agentes establecieron un amplio dispositivo a lo largo de las carreteras N-120 (Ourense-Vigo) y la N-542 (Ourense-Pontevedra), así como la autovía Rías Baixas, para localizar el vehículo en que se desplazaba el presunto narcotraficante. La vigilancia dio fruto a las 20.00 horas en el acceso centro, donde los agentes localizaron el automóvil, interviniendo a su conductor 60 gramos de cocaína, que llevaba ocultos entre sus ropas y 1.200 euros en efectivo.
En un posterior registro de cuatro viviendas, los policías decomisaron 700 gamos de cocaína, cuatro básculas de precisión, 14 teléfonos móviles, dos pistolas (una real y otra simulada) y diverso material para manipular sustancias estupefacientes. Los detenidos carecen de antecedentes por tráfico de drogas.
