Leonardo Lemos Montanet, obispo de Ourense, cumple su tercer aniversario desde la llegada a la diócesis ourensana
Se cumplía el pasado día 11 el tercer aniversario de la llegada a la diócesis ourensana del obispo José Leonardo Lemos Montanet. Tres años en los que su presencia ha sido constante en los distintos ámbitos de la sociedad con cercanía y reconocida entrega para afrontar problemas diocesanos nada fáciles que posee esta Iglesia en Ourense y que le hacen sufrir. Comienza ahora su primera Visita Pastoral a todas las parroquias, una de las misiones fundamentales para los obispos marcada ya en el Concilio de Trento y sostenida durante siglos.
Después de tres años en Ourense va a comenzar la Visita Pastoral a la diócesis.
El día 11 de febrero hizo tres años de mi entrada y, aunque canónicamente no hice la Visita Pastoral en sentido estricto, sin embargo estuve presente en gran parte de las parroquias, en alguna varias veces y visité todas las de la ciudad, así como la mayor parte de las comunidades religiosas.
Con motivo del inicio de la Visita Pastoral acaba de publicar una carta pastoral.
Ha brotado de mi corazón de hermano, padre y pastor, pensando, de manera especial en los sacerdotes, en los fieles laicos que se mueven en el entorno de las parroquias y son los mejores colaboradores de sacerdotes y del obispo.
Creo conocer el esfuerzo que significan esas visitas por haber hecho tres seguidas como secretario a todas, y a algunas había que acudir incluso caminando. ¿Hoy le va a ser más fácil llegar a todos los rincones?
No regatearé esfuerzos. Iré a donde tenga que ir y adonde estime oportuno el sacerdote. Los diocesanos tienen derecho a ver, saludar y hablar con su obispo. En cuanto a la situación de las parroquias, creo que ha cambiado mucho porque se avanzó considerablemente en la puesta al día de las infraestructuras. Hoy se puede acceder en coche; sin embargo, si hay que ir a pie, no me preocupa, siempre me gustó caminar.
¿A quién pretende dirigir esa visita que marca el Código de Derecho Canónico para que los obispos realicen cada cinco años?
Va dirigida a toda la comunidad para conocer, saludar y atender a aquellos que no conocen al obispo y quieren hablar con él. Es necesario conocer la situación de la tarea pastoral de los sacerdotes; apoyarles o estudiar algún cambio del plan pastoral.
Los tiempos han cambiado y esta diócesis eminentemente rural se está despoblando.
La situación en nuestra provincia y en toda Galicia es muy seria. Existen aldeas que han quedado vacías, en otras hay muy pocos vecinos, muchos son ancianos y la Iglesia no puede abandonarles. El sacerdote es la presencia de la Iglesia en medio de ellos; en ocasiones es la única persona que les visita y les atiende.
Cada vez hay menos clero y éste de edad avanzada. ¿Juzga que la Visita Pastoral supone un estímulo para las parroquias?
Constituye un acontecimiento eclesial en el seno de una parroquia. He visto como la han preparado en alguna de ellas, con qué ilusión participaron los distintos grupos apostólicos: catequistas, niños y jóvenes de la catequesis, grupos de jóvenes que se están preparando para el matrimonio, Cáritas, Legión de María, Conferencias de San Vicente de Paúl, Grupo de Liturgia, Consejo Pastoral, Consejo de Economía, comunidades religiosas, comunidades catecumenales... En alguna me encontré con un numeroso grupo de inmigrantes a la sombra y en el entorno de la parroquia. A algunos que critican la labor que hace la Iglesia, a través de sus parroquias, les invitaría a que comprobasen como con pocos medios se puede llegar a tantos. Digo esto porque siempre están dándole vueltas al IBI y a otras cosas. Se critica lo que no se conoce. ¿Qué sería de nuestros barrios, villas, o el mundo rural si cerramos la parroquia o dejamos de prestar la ayuda que se realiza…o si les privamos de la presencia del cura?, ¡no me lo puedo imaginar!
Algunos consideraban la visita Pastoral como una inspección parroquial.
El otro día le decía a un sacerdote que estaba un poco nervioso y preocupado por la respuesta de los feligreses: tranquilo, esta no es una auditoría eclesiástica. Es un encuentro del pastor con la realidad que viven los fieles y los sacerdotes, cotidianamente.
Antiguamente tenían lugar todos los días de la semana. Hoy con la despoblación, ¿es una dificultad o va a ser resuelta visitando sólo los fines de semana?
Evidentemente, es necesario prestar atención a la situación de nuestras parroquias rurales durante la semana y en los meses de invierno; por este motivo, desde el equipo de la Vicaría para la Pastoral han elaborado un programa en donde se contemplan, prioritariamente, los fines de semana. Si la visita fuese un asunto administrativo y de control serviría cualquier día, pero como no lo es, lo que se busca es el “encuentro” del pastor con los fieles que viven su fe en un lugar concreto y en una situación determinada ¡eso es lo único importante!
Ya ha ido conociendo al clero durante estos años. ¿Qué opinión tiene de los agentes de pastoral?
A lo largo de estos tres cursos me he podido encontrar con todo el clero, por lo menos he visitado todas las zonas pastorales y he tenido más de un encuentro. Puede ser que todavía no conozca a algún sacerdote, pero no ha sido porque yo no lo intentara, sino porque no se ha dejado conocer o tiene algunas dificultades que yo ignoro y le impiden asistir a los encuentros que tenemos cada mes. El clero ourensano es entregado y fiel. He encontrado detalles edificantes a la hora de vivir su ministerio pastoral. Creo que nuestra sociedad todavía no ha reconocido la labor callada, y en algunos casos heroica, de muchos de nuestros curas, sobre todo los del ámbito rural.
Es una diócesis eminentemente mariana y en este año se celebra el Jubileo coincidiendo con los 50 años de la Coronación de la Virgen de Los Milagros. ¿Marcará también esta efemérides la visita?
Nuestra Diócesis es eminentemente mariana; sinceramente pienso que aunque no estuviésemos celebrando este año jubilar mariano, la presencia de la Virgen María estaría presente en esta visita.
