SEQUÍA

Un marzo histórico en lluvia certifica el final de la sequía en Ourense

Los ríos ourensanos son los que más han crecido de toda la cuenca, que abarca cuatro provincias

Las lluvias llegarán de nuevo hoy para acompañar a los ourensanos en Semana Santa, aunque no serán necesarias para paliar una prolongada sequía que ya ha llegado a su fin. Los indicadores no dejan lugar a dudas, tras cinco meses en alerta y más de un año en prealerta. De momento, a la espera de la reunión de los expertos, la situación mejoró y todos los datos están en balance positivo.

Tras el paso de la borrasca Hugo, el mes de marzo se convierte en Ourense en el más lluvioso desde que hay registro históricos y da carpetazo de forma definitiva a una situación de sequía calificada como histórica. A lo largo de este mes, llovió más en Ourense que en diciembre, enero y febrero juntos. Esto, que era algo que ni siquiera preveían las predicciones más optimistas, ha catapultado a los ríos de la provincia a la mejor situación hídrica de los dos últimos años.

Este año hidrológico (octubre-septiembre) han caído ya 847,9 litros por metro cuadrado, más que lo norma, que se sitúa en 781 l/m2.


El agua de los ríos


Por los ríos ourensanos circula hasta un 166% más de agua por encima de lo normal, lo cual llama la atención en una provincia que hasta hace apenas dos meses estuvo siempre en cifras negativas. Los principales ríos de la provincia están en máximos históricos.

El río Miño no llevaba tanta agua desde principios de 2016. De hecho, pese a que, de media, esta semana transitan 580 m3/s, se llegaron a sobrepasar los 900 m3/s en algunos periodos, una situación que no se recordaba en la ciudad desde antes de que se hubiese declarado la prealerta por sequía en el mes de enero de 2017.

El río Sil, lleva un caudal de 160 m3/s, lo que supone hasta un 26%por encima de su media histórica.

Todavía se aprecian más los récords en el río Limia, que circula a su paso por Xinzo con hasta un 205% más de agua que lo que venía siendo habitual en esta época del año. La mayor anomalía se en la Baixa Limia, donde más afectaron las lluvias de los últimos meses. Allí, el río Caldo, con casi 10 m3/s, está hasta un 377% por encima de lo normal.

Con esto, los ríos ourensanos son los que ha experimentado una mayor crecida en toda la cuenca. Si en la provincia tienen un 166% más de agua, el incremento es del 122% en Lugo y Pontevedra y solo del 33% en León.


Los embalses, peor cara


La otra cara se vive en los embalses, que pese a que han registrado un importante incremento, están todavía al 72% de su capacidad total, por debajo de las demás provincias. Y es que en Lugo, están ya casi al 91%, en Pontevedra al 92,45% y en la provincia de León supera ya el 86%.

Así, queda mucho recorrido para llegar a cifras normales. De hecho, Ourense es la única provincia que aún tiene menos agua embalsada que la media histórica. Eso sí, el 72% de capacidad que se registra ahora está ya 11 puntos porcentuales por encima que la acumulada en estas fechas el año pasado, cuando estaban al 61%. 

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