El futuro de la capilla de Os Remedios parece un poco más despejado después de la reunión que ayer mantuvieron representantes de la familia propietaria, del Concello, la Diputación, el Obispado y la Xunta.
Mientras Carmen Bobillo, una de los titulares, destacaba la 'buena voluntad de todas las partes. Estamos más satisfechos (que en encuentros anteriores)', el alcalde, Francisco Rodríguez, detallaba que el siguiente paso será la convocatoria de una reunión técnica que siente las bases -mediante la redacción de un informe jurídico- para que las instituciones públicas puedan realizar aportaciones económicas para rehabilitar el templo.
Según Francisco Rodríguez, la mitad de los propietarios han cedido al Obispado -o lo van a hacer- su parte del inmueble, mientras que la otra parte está dispuesta a ceder el uso y la gestión del templo pero no la propiedad. Es en este nuevo escenario en el que se tienen que estudiar las aportaciones económicas de las administraciones, puesto que éstas no pueden invertir dinero público en propiedades privadas.
Por su parte, el nuevo obispo, Leonardo Lemos, dejó claro en el encuentro que el Obispado no desea la propiedad de la capilla, sino que su máximo interés 'es que se recupere y abra cuanto antes al culto'. De hecho, a la institución le gustaría que estuviera operativa para la romería del 8 de septiembre. La aportación del Obispado a la reforma se centraría en el interior de la capilla (bancos, altar...), e incluiría las aportaciones realizadas por los fieles tras el incendio (alrededor de 55.000 euros).
SE PEDIRÁN TAMBIÉN SUBVENCIONES AL ESTADO
Tras la reunión de ayer, queda ahora aclarar en qué medida pueden la s instituciones públicas realizar aportaciones a la reforma de la capilla, a las que se podría añadir la petición de subvenciones al Ministerio de Cultura, al tratarse el templo de un Bien de Interés Cultural. Por su parte, el Concello verá 'se podemos colaborar económicamente', dijo el alcalde, que recordó que ya había asumido las obras de emergencia realizadas en el inmueble, para garantizar la seguridad en la zona. Aquellos trabajos, que superaron los 45.000 euros, fueron abonados por la institución municipal, que ahora se los solicita a los propietarios. Estos, por su parte, alegan que deben abonarse entre todos los dueños, de los que, según el alcalde, se desconoce exactamente cuántos y quiénes son.
Según Francisco Rodríguez, la mitad de los propietarios han cedido al Obispado -o lo van a hacer- su parte del inmueble, mientras que la otra parte está dispuesta a ceder el uso y la gestión del templo pero no la propiedad. Es en este nuevo escenario en el que se tienen que estudiar las aportaciones económicas de las administraciones, puesto que éstas no pueden invertir dinero público en propiedades privadas.
Por su parte, el nuevo obispo, Leonardo Lemos, dejó claro en el encuentro que el Obispado no desea la propiedad de la capilla, sino que su máximo interés 'es que se recupere y abra cuanto antes al culto'. De hecho, a la institución le gustaría que estuviera operativa para la romería del 8 de septiembre. La aportación del Obispado a la reforma se centraría en el interior de la capilla (bancos, altar...), e incluiría las aportaciones realizadas por los fieles tras el incendio (alrededor de 55.000 euros).
SE PEDIRÁN TAMBIÉN SUBVENCIONES AL ESTADO
Tras la reunión de ayer, queda ahora aclarar en qué medida pueden la s instituciones públicas realizar aportaciones a la reforma de la capilla, a las que se podría añadir la petición de subvenciones al Ministerio de Cultura, al tratarse el templo de un Bien de Interés Cultural. Por su parte, el Concello verá 'se podemos colaborar económicamente', dijo el alcalde, que recordó que ya había asumido las obras de emergencia realizadas en el inmueble, para garantizar la seguridad en la zona. Aquellos trabajos, que superaron los 45.000 euros, fueron abonados por la institución municipal, que ahora se los solicita a los propietarios. Estos, por su parte, alegan que deben abonarse entre todos los dueños, de los que, según el alcalde, se desconoce exactamente cuántos y quiénes son.
