El colectivo que más tiempo sigue pendiente de una oportunidad laboral es el de 60 a 64 años, que supone el 22 % de los 20.601 desempleados
Las cifras de empleo han tornado a positivo en los dos últimos años, pero la consecución de un trabajo no es tarea rápida y mucho menos sencilla. El propio Ministerio de Empleo así lo reconoce a través de sus propios datos al certificar que prácticamente la mitad de los parados de la provincia llevan más de un año inscritos en el Servicio Público de Empleo Estatal (Sepe) en espera de una oportunidad.
A 30 de septiembre había en Ourense 20.601 desempleados, de los que 10.140 acumulan ya más de un año sin trabajar. Es decir, el 49,22% del total. Pero, más allá del mero valor estadístico, hay un claro perfil social que abre una brecha importante: cuanto más edad tiene el parado, más tiempo tiene de espera para conseguir un empleo.
De los 10.140 parados de más antigüedad, 2.231 están en la franja entre 60 a 64 años, por lo tanto, llegan al 22%. Es el tramo de edad con un mayor porcentaje de "estancamiento" laboral, donde conseguir insertarse en el mercado laboral es casi una carambola. Pero desde los 45 años, se supone que en plena madurez profesional, la permanencia en el paro es cada vez más duradera.
Entre los 45 y los 49 años hay 1.317 parados ourensanos que llevan más de un año sin trabajo; es decir, el 12,9% del total. Entre 50 y 54 años, el 15,5% (1.581 parados) también han cumplido más de doce meses esperando volver a trabajar. Esa situación también afecta a los 2.204 que están entre los 55 y los 59 años, por lo tanto, al 21.7%.
En todo caso, en la franja de edad que va desde los 60 a los 64 años de edad se incluye como demandante de empleo un amplio colectivo de personas que ya no trabajan y que han pactado con su empresa un adelanto de su jubilación. Como parte de ese acuerdo se incluye un periodo en situación de desempleo antes de enlazar con los 65 años, por lo tanto, con derecho a percibir ya la pensión de jubilación.
Aunque la mayoría de las reflexiones sobre la situación laboral apuntan a que el "drama" está en el alto porcentaje de paro juvenil, lo cierto que es el mayor contingente es el de adultos. A saber: de los 20.601 desempleados registrados a 30 de septiembre, el grupo más numeroso (3.207) está entre los 55 y los 59 años, mientras que 1.701 tienen entre 25 y 29 años.
FORMACIÓN
Y si las personas de edad avanzada son las más vulnerables a la hora de reinsertarse en un puesto de trabajo, las que tienen una formación media son las que conforman el grupo más numeroso de parados, pero también son los que tienen más fácil reincorporarse al empleo. De los 20.601 parados contabilizados el mes pasado, el 58,3% (12.014 personas) acreditaba estudios secundarios.
El segundo grupo más afectado por el desempleo es el de los universitarios ya que 3.532 (17,1%)están inscritos en el Sepe después de haber finalizado su carrera. En la tercera posición aparecen los parados con estudios primarios completos: 3.411 (16,5% del total). A continuación se sitúan las 1.462 personas (7%), que únicamente tienen estudios primarios incompletos y cierran el grupo los parados sin estudios o "analfabetos", según el Sepe, que suman 182 personas (0,8% del total).
