El beneficiario de la supuesta trama no pudo ser juzgado ayer porque está en paradero desconocido.
Rocío J.J., de etnia gitana, aceptó ayer en el Juzgado de lo Penal 1 los hechos que le imputaba la fiscal: formar parte de un entramado, junto a otros dos miembros de su familia, para formalizar una pareja de hecho ilegal con el fin de que un ciudadano dominicano consiguiera la nacionalidad. La mujer y su verdadera pareja, Julián M.G., aceptaron siete meses de prisión y multa de seis meses a cuatro euros al día por falsedad.
Por su parte, Amador R.F., el artífice del plan, fue condenado a un año, nueve meses y un día de cárcel así como multa de nueve meses (con cuota diaria de cinco euros) por un delito continuado de falsedad. Este último reconoció que puso en contacto a Luis Manuel S.D.L. con Julián y su pareja Rocío en agosto de 2012 para regularizar su situación en España.
Por su parte, el beneficiario de la supuesta trama no pudo ser juzgado ayer porque está en paradero desconocido.
Julian M.G. , siguiendo las instucciones de Amador, procedió a empadronar al dominicano en su domicilio de Ribadavia con el fin de engañar a los funcionarios del Concello. Ese mismo día, el 16 de agosto de 2012, Rocío J.J. y Luis Manuel S.D.L. solicitaron la inscripción como pareja de hecho en el registro de la Xunta a pesar de que no existía convivencia entre ambos. Entre la documentación aportada, había incluso una declaración jurada de que ambos no tenían otras parejas.
Una vez formalizado ese trámite, Luis Manuel presentó ante la Subdelegación del Gobierno una solicitud de tarjeta de residencia familiar de ciudadano de la UE. No obstante, le fue denegada al comprobar la falsedad de los datos aportados. Asesorado por Amador, presentó recurso de alzada acompañando un contrato de trabajo mendaz. Simuló una relación laboral con una empresa de Murcia.
