La reordenación del tráfico urbano en el entorno de la estación de tren por la construcción del aparcamiento de la nueva intermodal amenaza la seguridad vial de los viandantes, ya que muchos se ven obligados a cruzar los cuatro carriles de la avenida de Marín en el único punto sin balizar, debido a que los pasos de peatones provisionales distan hasta 300 metros para aquellos que salen del centro de salud o de la estación.
El BNG exigió cambios a la Concejalía de Infraestructuras en junta de área, pero tres días después todo sigue igual, por lo que advierten de que o se hace algo o podría haber una desgracia. "Para nós é un exemplo claro de descoordinación entre administracións, que pode provocar danos colaterais ou afectar a seguridade viaria e, por extensión, á seguridade das persoas", apunta el portavoz nacionalista, Luís Seara.
La "descoordinación" a la que alude el BNG viene dada por que el concejal de Infraestructuras, Miguel Caride, explicó en junta de área que el balizamiento había sido realizado por el Administrado de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) y que los cambios que fueran necesarios se analizarían en una comisión de seguimiento de las obras.
Pero, para el grupo nacionalista, no se debería esperar más, ya que no son pocas las personas de avanzada edad y más jóvenes que, ante la incomodidad de tener que caminar grandes distancias, aprovechan la ausencia de barreras en la entrada de la estación para cruzar cuatro carriles de la avenida de Marín.
"Non podemos estar agardando a que haxa unha desgraza para tomar decisións", dijo Seara, que tras un estudio a pie de calle, cifró en "máis de 300 metros" la separación entre pasos de cebra. Después de que el Concello "non movese ficha", Seara exigió ayer que se cese con la "irresponsabilidade" y busque una solución "de carácter inmediato".
Además, advierten de que el aumento del flujo de viandantes en el entorno de la estación, por el comienzo del curso universitario, será un problema añadido.
Asimismo, Luis Seara aprovechó de nuevo para pedir la paralización del proyecto actual, "que non é intermodal", y que causará "un caos urbanístico".
