La decimosexta edición del OUFF convertirá a la ciudad en la capital de cine durante los próximos nueve días. En la noche de ayer, se subió el telón a 'las emociones cinematográficas', tras una gala austera, pero hechizante

Ourense abre el telón a las emociones

El público abarrotó el Auditorio Municipal durante la gala inaugural de la decimosexta edición del OUFF. (Foto: XESÚS FARIÑAS)
La alfombra roja del Festival de Cine Internacional de Ourense se estrenó anoche con una gala inaugural que llenó de espectadores el Auditorio Municipal, entre los que se econtraban cinéfilos, actores, políticos y personajes de la vida cultural ourensana. Todos ellos pudieron disfrutar del último trabajo de Benito Zambrano, 'La Voz Dormida', que se encargó de inaugar el festival.
Pese a la anunciada austeridad, marcada por los recortes presupuestarios, la decimosexta edición del OUFF arrancó con la misma intensidad de los años precedentes, acomodando al público con una hechizante puesta en escena, que sirvió de preludio al pase de la dramática cinta de apertura. Precisamente, los presentadores de la gala destacaron el lema de la presente edición: 'Tócache', que apela directamente a las mil y una emociones que el séptimo arte es capaz de transmitir al público.

El dúo musical compuesto por Anxo Graña y Pablo Souto fueron los responsables de poner la banda sonoro a la gala, logrando crear una atmósfera de sensaciones que navegaron por toda la sala. Asimismo, un grupo de estudiantes de la Escola de Artes Antonio Faílde protagonizó una performance con las 'rodas de afiar' como uno de los elementos centrales de la ourensanía, y que posteriormente sirvieron para evocar las reminiscencias de un pasado que contribuyó a configurar el presente emulando 'La Voz Dormida'.

En la cinta, Zambrano revisita, a la vez que reivindica, una época histórica 'demasiado desconocida', pero que determinó, posteriormente, la construcción de una España 'sólo para los privilegiados que apoyaron la represión, alguno de ellos incluso se convirtió durante la inmediata democracia en presidente del Gobierno', criticó el cineasta, recibiendo así un acalorado y largo aplauso de un público entregado a las palabras del director andaluz. Sin embargo, uno de los momentos más aclamados y emotivos fue cuando el director de 'La Voz Dormida' recordó el papel 'de todas las mujeres sin voz que, debido a su lucha por conseguir una España más justa, fueron vejadas, fusiladas, torturadas o violadas en las prisiones y campos de trabajo creados por los vencedores'.

La película inaugural y las reivindicativas palabras de Zambrano durante su presentación anuncian una edición del OUFF marcada por el cine social y de denuncia. De hecho, el cine comprometido será uno de los nexos de unión de las cinco categorías a concurso con las que cuenta esta edición. Las temáticas irán desde la homosexualidad, la emigración, la crisis económica, la multiculturalidad o los avatares de la condición humana, aunque también habrá lugar para la comedia en una sección paralela, pero siempre bajo unos criterios de selección en los que el jurado ahondó en la búsqueda de un cine inteligente, fresco, innovador, positivo y, por supuesto, independiente.

Te puede interesar