Ourense registra seis incendios y tres víctimas mortales en lo que va de 2023

La cifra de fallecidos por incendios en Ourense supera en solo un mes a los contabilizados en los años 2017 o 2019

En lo que va de 2023, la provincia de Ourense fue escenario de seis incendios de consideración en viviendas que se cobraron tres víctimas mortales. Esta alarmante cifra supera, en un mes, a las de algunos años como 2017 o 2019, cuando se registraron dos. 

En cuanto a la ubicación, todos menos uno ocurrieron en la ciudad. La excepción es el que se ocasionó el pasado lunes en un piso de O Barco. La víctima murió asfixiada y el fuego se produjo cuando se descontroló el gas de una estufa de butano

En cuanto a los de Ourense, el primero del año fue el fuego de Covadonga que acabó con la vida de Edilma y Valentina. Un cortocircuíto en un ladrón de enchufes habría sido la causa del suceso. Tres días más tarde ocurría otro fuego en la rúa Ribeiriño, en la campana extractora de la cocina. Dos personas fueron trasladadas al hospital por inhalación de humo. 

Los últimos fueron la sucesión en menos de 24 horas de incendios en la avenida de La Habana

Por otra parte, en la última década, la provincia contabilizó 34 muertos.  En 2022, murieron cuatro personas, solo una más que en un mes de  este año.  Solo lo superan el 2020, con cinco fallecidos, y el 2013, en el que ocho personas perdieron la vida por incendios de esta tipología.

 Según los datos de la Fundación Mapfre, las causas más probables de que se produzca un fuego son las sobrecargas eléctricas. También los fuegos directos (una comida, por ejemplo) o los aparatos de calor. Las colillas o la propia naturaleza (un rayo) son otras tipologías que pueden darse en la provincia. Por otra parte, en cuanto a los fallecidos, puede determinarse un perfil concreto: el de un hombre entre 85 y 89 años. También destacan los fallecidos, de entre 65 y 74 años, ya que los de menos edad son eventuales. Además, el 63% ocurren en horario diurno, entre las 8,00 horas y las 20,00, y los restantes por la noche. 

Según los expertos, “es fundamental” potenciar la instalación de detectores de humo en las viviendas, unos aparatos con un coste inferior a los 20 euros.  

Por otra parte, puntualizan que en los últimos años, el salón se constituyó como la parte más peligrosa de las viviendas: “Con las campañas de concienciación, se tiene más cuidado en la cocina”, indica.

Te puede interesar