El estado de alarma decretado por el Consejo de Ministros para luchar contra el coronavirus tendrá consecuencias en los padres imputados en delitos por maltrato que tuvieran concedidas visitas a sus hijos, cuya guarda y custodia la ostente la madre en el partido judicial de Ourense.
El juez decano, Leonardo Álvarez, hizo público ayer un acuerdo para arrojar luz sobre los regímenes de visitas a menores con padres separados. Las resoluciones dictadas por el Juzgado de Instrucción 3, con competencias en violencia de género, que incluyan cualquier mención a un régimen de visitas que se reconozca a un progenitor no custodio de Ourense respecto a sus hijos menores, quedan sin efecto en tanto dure el estado de alarma. No afecta a las custodias compartidas, que sí se harán efectivas.
Ahora bien, todas las resoluciones dictadas por el Juzgado de Familia (Instancia 6), cualquiera que sea el magistrado que las haya rubricado, mantendrán su vigencia mientras perdure el estado de alarma, salvo en una situación de contagio o de naturaleza análoga haga difícil o imposible su efectividad.
Según aclara el decano: "Se exceptúan de lo dicho las visitas que deben hacerse efectivas en el punto de encuentro, así como las entregas y recogidas de menores que deban realizarse en el mismo lugar, dado que el referido centro se encuentra cerrado".
Aclara el magistrado que estos nuevos parámetros se ajustan a las medidas acordadas por la sala de gobierno del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia para adaptar la referida declaración a las circunstancias y necesidades de los distintos órganos judiciales que tienen su sede en la comunidad autónoma gallega. Afecta a todos los procedimientos que guarden relación con menores y que impliquen cualquier tipo de regulación sobre un régimen de visitas y análogo, en tanto dure el estado de alarma.
