El perito judicial enviado por el Juzgado Central de lo Contencioso Administrativo número 4 de Madrid acudió ayer al claustro de San Francisco para verificar el estado de las obras y emitir el correspondiente informe que permitirá el reinicio de los trabajos de emer gencia encaminados a evitar el progresivo deterioro del monumento. El perito constató que, en efecto, las obras son urgentes y así lo plasmará el informe que remitirá en los próximos días al juez madrileño para que éste ordene el reinicio de las mismas.
El perito judicial enviado por el Juzgado Central de lo Contencioso Administrativo número 4 de Madrid acudió ayer al claustro de San Francisco para verificar el estado de las obras y de la conservación del propio monumento, con el fin de emitir el informe pericial necesario para que el juez madrileño permita la reanudación de las obras de emergencia.
El perito acudió ayer al claustro acompañado por técnicos del Ministerio de Cultura y de la empresa Copasa, adjudicata ria de las obras de emergencia paralizadas el pasado 29 de enero por la falta de dicho informe. Hoy está previsto que el perito vuelva a San Francisco, esta vez acompañado por técnicos de la primera adjudicataria, la UTE Constructora Hispánica y Castilla de Construcciones, que fue la que interpuso un recurso por la falta del informe pericial y motivó así la decisión judicial de paralizar las obras de emergencia iniciadas el 14 de enero.
Según confirmó ayer el alcalde, Francisco Rodríguez, el perito encargado de redactar el informe constató la sensación generalizada de que los trabajos para evitar que el claustro sufra un mayor deterioro del que ya presenta son de suma necesidad y urgencia (la climatología de estos días, con fuertes lluvias y viento, multiplica el riesgo para el claustro), algo que plasmará en el documento que, con toda seguridad, presentará ante el juez madrileño en los próximos días. Francisco Rodríguez confía en que el titular del juzgado madrileño permita la reanudación de las obras de emergencia una vez que reciba y revise el documento. De hecho, fuentes cercanas al Ministerio de Cultura aventuran que el reinicio de los trabajos podría efectuarse en la próxima semana, aspecto que tendrá que ser ratificado por el magistrado.
Las obras de emergencia, presupuestadas en 1,7 millones de euros y la previsión de cuatro meses para su ejecución, tienen como objeto evitar el derrumbe del monumento mediante el apuntalamiento de cubiertas y el refuerzo de los muros, toda vez que las obras del complejo cultural están pendientes de que se resuelva el conflicto judicial que las mantiene paralizadas desde el año 2004.
El perito acudió ayer al claustro acompañado por técnicos del Ministerio de Cultura y de la empresa Copasa, adjudicata ria de las obras de emergencia paralizadas el pasado 29 de enero por la falta de dicho informe. Hoy está previsto que el perito vuelva a San Francisco, esta vez acompañado por técnicos de la primera adjudicataria, la UTE Constructora Hispánica y Castilla de Construcciones, que fue la que interpuso un recurso por la falta del informe pericial y motivó así la decisión judicial de paralizar las obras de emergencia iniciadas el 14 de enero.
Según confirmó ayer el alcalde, Francisco Rodríguez, el perito encargado de redactar el informe constató la sensación generalizada de que los trabajos para evitar que el claustro sufra un mayor deterioro del que ya presenta son de suma necesidad y urgencia (la climatología de estos días, con fuertes lluvias y viento, multiplica el riesgo para el claustro), algo que plasmará en el documento que, con toda seguridad, presentará ante el juez madrileño en los próximos días. Francisco Rodríguez confía en que el titular del juzgado madrileño permita la reanudación de las obras de emergencia una vez que reciba y revise el documento. De hecho, fuentes cercanas al Ministerio de Cultura aventuran que el reinicio de los trabajos podría efectuarse en la próxima semana, aspecto que tendrá que ser ratificado por el magistrado.
Las obras de emergencia, presupuestadas en 1,7 millones de euros y la previsión de cuatro meses para su ejecución, tienen como objeto evitar el derrumbe del monumento mediante el apuntalamiento de cubiertas y el refuerzo de los muros, toda vez que las obras del complejo cultural están pendientes de que se resuelva el conflicto judicial que las mantiene paralizadas desde el año 2004.
