El PP perdió la votación a favor de los Mupis, que seguirán porque la moción que pedía su supresión no es vinculante
Una reunión de portavoces decidirá el futuro del Centro de interpretación de parques naturales, ubicado en Quintela de Canedo; un edificio a medio construir y abandonado, lleno de pintadas y maleza, para el que el grupo socialista, por boca de Carmen Rodríguez Dacosta, pidió su ejecución y un uso que no eche a perder lo ya invertido; instando a la Xunta a informar oficialmente al Concello de la tramitación en la que se encuentra y a garantizar el reinicio de las obras.
La pretensión socialista sólo prosperó en parte porque se impuso, con el apoyo de DO (que antes había expresado su apoyo a la ideadel PSOE), la enmienda del PP para instar a la Xunta a informar al Concello y, con esa explicación, reunir a los portavoces para "tomar a mellor decisión" al respecto.
Pero el asunto acabó derivando en una pulla partidista, cuando el portavoz y edil de Medio Ambiente, José Araújo, se "sorprendió" con la exposición de motivos de la propuesta, que apuntaba, según él, a una punga interna entre la agrupación local y la provincial; pues la moción recordaba la puesta en marcha del proyecto por el exalcalde Francisco Rodríguez (a la sazón responsable de la ejecutiva local) pero que no daba el nombre del conselleiro que comprometió la obra y que no fue otro que Pachi Vázquez, líder del partido en la provincia. Dacosta, molesta, negó la "loita familiar" y reconoció finalmente el trabajo de Vázquez en este asunto. Antes, expresó su temor por que la paralización de esta obra haga perder la subvención europea concedida. Y criticó la falta de respuesta de la Xunta al respecto, también, recordó al alcalde, cuando éste formaba parte del Gobierno autonómico. Vázquez Abad intervino para precisar que a él no le llegó ninguna petición de mediación o de ayuda nunca sobre el Centro de interpretación. Si bien DO calificaba la propuesta socialista de clara y objetiva, Martiño Vázquez, de Ourense en Común, arremetía contra un Centro de interpretación que, contrariamente a lo que es su finalidad, se encuentra bastante lejos del patrimonio que debe interpretar.
Araújo recriminó que no haya huellas de la gestión municipal ante la Xunta en este asunto y dijo que no ha habido tiempo de enmendar todos los problemas. "Vostedes tiveron oito anos e non o fixeron; podemos asumir culpas pero non nos esixan solucións a todo en 100 días".
Larga vida a los mupis
El PP perdió la votación de la propuesta de DO, que reclamaba la eliminación de los Mupis en toda la ciudad y la cancelación del pliego de condiciones que se está redactando por la Concejalía de Comercio. Pérez Jácome los tachó de barrera arquitectónica y visual, sin que, además, genere ingresos adecuados al Concello. La edil responsable, Ana Morenza, se mostró partidaria de estas instalaciones, cuya concesión se ligará, además, a las de las marquesinas y donde habrá una adecuada recogida de pilas. Así lo establecerá el pliego de condiciones, que se hará pese a que DO y "marea" ganaron la votación de la propuesta de Jácome, con una enmienda de Ourense en Común que plantea la retirada de ese pliego y la remunicipalización del servicio, aceptada por DO. Los socialistas, que pidieron unas condiciones estrictas -dijo Juana Ageitos- se abstuvieron.
De refugiados y conciliación
La implicación del Concello en la ayuda a los refugiados sirios repitió argumentos esgrimidos después a propósito de la violencia machista. El planteamiento socialista de articular fondos y campaña de sensibilización para este fin se aprobó finalmente, pero con nueve respaldos (los del PSOE y la "marea") y una amplísima abstención de 18 votos (de PP y DO).
Más consenso tuvo la iniciativa de Laura Nóvoa (DO) para una reunión con las asociaciones de padres de la ciudad con el objeto de conciliar la vida familiar y laboral. Logró la unanimidad de toda la Corporación, aunque con la matización de Belén Iglesias (edil de Educación) de que muchos de sus planteamientos ya se están tramitando o llevando a cabo.
