Protección Civil alerta del aumento de la desigualdad: "Lo peor está por venir”

“En Ourense hay mucha miseria, pero lo peor está por venir”, señala Juan Carlos González, coordinador de Protección Civil de Ourense. Durante la pandemia, los 43 voluntarios que conforman la institución en la ciudad trabajaron sin descanso y, ahora, extraen un análisis crítico de lo que vieron en las calles, donde solo estaban ellos y los que no tenían a donde ir. “Hubo que albergar a mucha gente sin techo, asintomáticos incluidos, se tomaron decisiones complicadas como confinar a varias personas en Oira, vimos muchas situaciones duras y tristes”, explica González. La atención que presta el ente local a los temas sociales no es suficiente desde el punto de vista de este colectivo: “Hay que atajar, poner mecanismos y poder estar fuertes para lo que se nos viene encima, cada día hay más y más pobreza, yo siempre le digo al Concello que hay que mejorar los servicios sociales”, señala el coordinador. “Con el covid nos pilló el toro”, lamenta y añade, “desde problemas económicos a psicológicos, hay mucha gente que está en riesgo de exclusión social en la ciudad”. Pocos voluntarios El cuerpo de Protección Civil está actualmente formado por 38 voluntarios, cuando en su día estaban censados cerca de 200. Tras la pademia, las altas cayeron un 12%, o bien porque es necesario estar vacunado o porque muchos temen contagiarse. Sin embargo, la cantidad de trabajo aumentó considerablemente. En total, en todo 2020, los voluntarios trabajaron 10.552 horas y en los meses que pasaron de 2021 alcanzaron las 4.206 trabajadas. En marzo, cuando el virus obligó a confinar la ciudad, la actividad se cuadriplicó: controles de confinamiento, guardias covid, cierres de parques, jardines y zonas verdes, rutas por las calles para controlar que todo el mundo estuviese en casa, entregas de comida y medicinas a personas en cuarenta o recogida de basuras a personas confinadas fueron algunas de sus funciones. Tanto se implicaron, que uno de los voluntarios se contagió de covid y todo un turno tuvo que guardar cuarentena. Los jubilados, un perfil al alza en los voluntarios Protección Civil se fundó en Ourense en 1995, fue una iniciativa de su actual coordinador Juan Carlos González quien define el oficio como “la manera de experimentar en primera línea la solidaridad de las personas, de ayudar y de sentirte útil”. Anima a todos a formar parte, “necesitamos más gente que nos eche una mano y todo el mundo vale”. Uno de los perfiles que más se incrementó es el de los jubilados “y estamos encantados porque es gente con bagaje y experiencia”, expresa el coordinador. También destaca que la ciudadanía “se volcó con la pandemia, nunca hubo una campaña de juguetes como la de este año y por ejemplo, la comunidad china, cuando no teníamos protección alguna, nos donó todo tipo de material, fueron los primeros en preocuparse”.