Sin la Xunta -ni el PP municipal-, el ministro de Fomento, José Blanco; el alcalde, Francisco Rodríguez; y los presidentes de Adif y Renfe, Antonio González y Teófilo Serrano, firmaron ayer el protocolo de colaboración para la integración ferroviaria. En un acto que no llegó ni a los 10 minutos quedó sellado el compromiso 'de facer o mellor proxecto para a cidade', según señaló Francisco Rodríguez, y de 'avanzar con firmeza y determinación para conseguir el objetivo de la llegada de la alta velocidad a Galicia', añadió después José Blanco.
El ministro reiteró el cumplimiento de los plazos: este año para la línea a Santiago-A Coruña y 2015 para la de Madrid, aunque apuntó que a finales de 2012 y principios de 2013 se producirá otro 'hito, con los trenes híbridos, otro punto de inflexión en este objetivo (de reducir tiempos de viajes)'. Blanco confió, además, en que la Administración gallega 'al final se sumará a este proyecto. Entiendo que no lo quiera hacer ahora, probablemente por una razón que no tiene nada que ver con el proyecto, pero, en todo caso, siempre busco el encuentro'. El titular de Fomento se mostró crítico con la postura de los populares, que le 'resulta difícil de explicar', dado que, a su juicio, el proyecto actual 'mejora notablemente lo que (el PP) nos había dejado diseñado, y espero que lo que estén reivindicando no sea lo que ellos dejaron diseñado en 2003, porque eso sería muy negativo para la ciudad de Ourense y el AVE gallego. Espero que maduren y estoy seguro que se sumarán' al protocolo, concluyó.
LAS ACTUACIONES
El protocolo establece las pautas y la metodología que regularán las relaciones entre las cuatro entidades en lo que respecta a la incorporación de Ourense a la alta velocidad. El documento plantea un trazado en variante con parámetros de alta velocidad que darán servicio a los tráficos de viajeros y mercancías, que circularán por vías independientes. Entre las actuaciones que contempla se incluyen las líneas ferroviarias de alta velocidad en ancho internacional y de tráfico convencional en ancho ibérico en un trazado independiente del corredor actual desde Seixalbo a la estación de A Ponte, la construcción del nuevo edificio de la estación y el proyecto urbanístico que se realizará en A Ponte, la estación de San Francisco y la vía a Seixalbo.
En este sentido, el protocolo proyecta cubrir las vías entre el actual paso superior de la avenida de Santiago y el nuevo edificio de la estación (17.700 metros cuadrados) y de ese puente hacia los actuales talleres de Renfe (5.700 metros cuadrados). Otra de las actuaciones incluidas es la reposición en Taboadela de las oficinas e instalaciones ferroviarias auxiliares de Adif.
LAS ACTUACIONES
El protocolo establece las pautas y la metodología que regularán las relaciones entre las cuatro entidades en lo que respecta a la incorporación de Ourense a la alta velocidad. El documento plantea un trazado en variante con parámetros de alta velocidad que darán servicio a los tráficos de viajeros y mercancías, que circularán por vías independientes. Entre las actuaciones que contempla se incluyen las líneas ferroviarias de alta velocidad en ancho internacional y de tráfico convencional en ancho ibérico en un trazado independiente del corredor actual desde Seixalbo a la estación de A Ponte, la construcción del nuevo edificio de la estación y el proyecto urbanístico que se realizará en A Ponte, la estación de San Francisco y la vía a Seixalbo.
En este sentido, el protocolo proyecta cubrir las vías entre el actual paso superior de la avenida de Santiago y el nuevo edificio de la estación (17.700 metros cuadrados) y de ese puente hacia los actuales talleres de Renfe (5.700 metros cuadrados). Otra de las actuaciones incluidas es la reposición en Taboadela de las oficinas e instalaciones ferroviarias auxiliares de Adif.
