La red de abastecimiento de la ciudad volvió en la noche de ayer a hacer de las suyas. Lo hizo entre el colegio Salesianos y el edificio Solaina (calle Progreso), que quedó anegada durante horas por el agua. El reventón de una tubería de fibrocemento a las 21,22 horas dejó un reguero de consecuencias en el tráfico rodado.
Asimismo, debido a que se anegó de agua la zona (todo el entorno de Os Remedios), la Policía Local tuvo que montar un dispositivo para regular el tráfico, que propició el cierre de los dos carriles en dirección salida de la ciudad que fueron desviados por la calle Progreso (sentido centro). A última hora de ayer, aún continuaban cortados.
La fuerza del reventón hizo que el agua llegase hasta cerca de la capilla de Os Remedios y cortó el suministro a viviendas.
El corte de tráfico se sucede mes y medio después de un percance similar en la misma zona, abriendo una fuerte brecha a lo largo del firme de la calle Pardo de Cela. La rotura obligó a cortar incluso el paso de peatones durante más de una hora en el Puente Romano por el gran charco de agua que se formó. Y cerró al tráfico uno de los carriles de la carretera N-120.
La fuerza del reventón hizo que el agua llegase hasta cerca de la capilla de Os Remedios y cortó el suministro a viviendas.
El corte de tráfico se sucede mes y medio después de un percance similar en la misma zona, abriendo una fuerte brecha a lo largo del firme de la calle Pardo de Cela. La rotura obligó a cortar incluso el paso de peatones durante más de una hora en el Puente Romano por el gran charco de agua que se formó. Y cerró al tráfico uno de los carriles de la carretera N-120.
