El sector de la construcción respalda la elaboración de un nuevo Plan Xeral en la ciudad pero, sobre todo, ha respirado tranquilo al conocer las intenciones del Concello de que unas normas transitorias regulen el urbanismo en Ourense una vez anulado el plan actual y hasta que entre en vigor el nuevo.
Era una preocupación muy importante para los constructores ourensanos y, en general, para todos los colectivos implicados en el sector. Por eso, la inminente anulación definitiva del Plan Xeral de Ordenación Municipal de la ciudad -que ya echaron abajo nueve sentencias- motivó el encuentro que ayer mantuvieron el alcalde, Francisco Rodríguez, y la concejala de Urbanismo, Áurea Soto, con representantes de los arquitectos, ingenieros industriales, aparejadores, constructores y empresarios. El objetivo era que estos colectivos conocieran de primera mano las intenciones del Concello si se cae el Plan, ya que teníamos una gran preocupación de si se paralizaría la ciudad, porque aquí depende mucha gente de la construcción, explicaba el presidente de la asociación de constructores, Eligio Nieto.
Tras el encuentro, Áurea Soto explicó que estamos todos conformes con que es preciso hacer un Plan Xeral, porque éste se va a anular, y en eso estamos trabajando el gobierno municipal, y nos han transmitido su apoyo. Para el presidente de los aparejadores ourensanos, Ignacio de Juan, estamos de acuerdo en un nuevo Plan porque es bueno ir renovando la ciudad y si tuviéramos que retrotraernos al de 1986 Ourense se paralizaría. Este respaldo, que supone asumir el criterio del actual grupo de gobierno discrepa, por cierto, del que mantiene el PP, que pretende mantener el actual con algunas modificaciones. Sin querer entrar en el debate político al respecto, De Juan entiende que no sé si jurídicamente sería factible volver a la exposición inicial de este planeamiento, pero también tardaría muchísimo porque habría que dejar plazo a las alegaciones aunque matiza que el plan nuevo recogerá muchas cosas del anterior.
No obstante, la principal preocupación del sector era conocer qué pasará en el periodo comprendido entre la anulación definitiva del PXOM y la aprobación del nuevo. La solución que explicó Soto -contando con el respaldo de los sectores implicados- es una normativa transitoria, que es una figura que se contempla en la Ley del Suelo que nosotros teníamos pensado solicitar a Santiago, que es quien tiene que redactarla y que tiene que ser aprobada por el Consello de la Xunta. Eso estaba ya acordado con el anterior gobierno y pensamos que vamos a tener toda la colaboración del nuevo.
Por su parte, Eligio Nieto afirmó que la reunión nos ha tranquilizado porque la norma transitoria es lo más rápido para empezar a trabajar y en tres o cuatro meses se puede resolver. Nos ha prometido que lo van a tener consensuado con la Consellería y preparado para cuando se caiga el Plan.
El avance se presentará el próximo año
Áurea Soto, afirmó que volvería a haber encuentros como el para abordar las necesidades a recoger en el diseño del futuro urbanismo de la ciudad. Señaló que la normativa transitoria no puede entrar en vigor hasta que no sea firme la nulidad del plan pero sí puede estar bastante adelantada esa ordenación, teniendo claro que no hay precedentes, ya que los hay de normativas pero no de ordenaciones que sean transitorias. Por su parte, también los representantes de los sectores vinculados a la construcción se mostraron partidarios de reuniones con el Concello cuando esté en redacción el nuevo Plan.
En la actualidad, la empresa redactora del nuevo PXOM, ya adjudicado, está recabando la información necesaria para la redacción del nuevo planea miento, cuyo avance podría presentarse ya públicamente a principios del próximo año, y ya se está redactando la cartografía. El Concello presentó un recurso en el Tribunal Supremo contra la anulación del actual para ganar tiempo antes de que ésta sea firme. Además, se han llevado a cabo modificaciones urbanísticas para intentar salvar proyectos importantes de la ciudad de la anulación del plan.
Tras el encuentro, Áurea Soto explicó que estamos todos conformes con que es preciso hacer un Plan Xeral, porque éste se va a anular, y en eso estamos trabajando el gobierno municipal, y nos han transmitido su apoyo. Para el presidente de los aparejadores ourensanos, Ignacio de Juan, estamos de acuerdo en un nuevo Plan porque es bueno ir renovando la ciudad y si tuviéramos que retrotraernos al de 1986 Ourense se paralizaría. Este respaldo, que supone asumir el criterio del actual grupo de gobierno discrepa, por cierto, del que mantiene el PP, que pretende mantener el actual con algunas modificaciones. Sin querer entrar en el debate político al respecto, De Juan entiende que no sé si jurídicamente sería factible volver a la exposición inicial de este planeamiento, pero también tardaría muchísimo porque habría que dejar plazo a las alegaciones aunque matiza que el plan nuevo recogerá muchas cosas del anterior.
No obstante, la principal preocupación del sector era conocer qué pasará en el periodo comprendido entre la anulación definitiva del PXOM y la aprobación del nuevo. La solución que explicó Soto -contando con el respaldo de los sectores implicados- es una normativa transitoria, que es una figura que se contempla en la Ley del Suelo que nosotros teníamos pensado solicitar a Santiago, que es quien tiene que redactarla y que tiene que ser aprobada por el Consello de la Xunta. Eso estaba ya acordado con el anterior gobierno y pensamos que vamos a tener toda la colaboración del nuevo.
Por su parte, Eligio Nieto afirmó que la reunión nos ha tranquilizado porque la norma transitoria es lo más rápido para empezar a trabajar y en tres o cuatro meses se puede resolver. Nos ha prometido que lo van a tener consensuado con la Consellería y preparado para cuando se caiga el Plan.
El avance se presentará el próximo año
Áurea Soto, afirmó que volvería a haber encuentros como el para abordar las necesidades a recoger en el diseño del futuro urbanismo de la ciudad. Señaló que la normativa transitoria no puede entrar en vigor hasta que no sea firme la nulidad del plan pero sí puede estar bastante adelantada esa ordenación, teniendo claro que no hay precedentes, ya que los hay de normativas pero no de ordenaciones que sean transitorias. Por su parte, también los representantes de los sectores vinculados a la construcción se mostraron partidarios de reuniones con el Concello cuando esté en redacción el nuevo Plan.
En la actualidad, la empresa redactora del nuevo PXOM, ya adjudicado, está recabando la información necesaria para la redacción del nuevo planea miento, cuyo avance podría presentarse ya públicamente a principios del próximo año, y ya se está redactando la cartografía. El Concello presentó un recurso en el Tribunal Supremo contra la anulación del actual para ganar tiempo antes de que ésta sea firme. Además, se han llevado a cabo modificaciones urbanísticas para intentar salvar proyectos importantes de la ciudad de la anulación del plan.
