Manteles y alfombras creadas a base de tierra cocida y barro y con aspecto de piedra, esculturas de gran formato de los que brotan rostros y bustos femeninos, pequeñas obras en cerámica que se pierden en curvas casi infinitas.
Esto es tan sólo parte de lo que el escultor y artista plástico ourensano Acisclo Manzano presentó ayer en la sala de exposiciones de Caixanova, a través de su más reciente muestra, 'As paisaxes de Acisclo'.
La exposición pretende rendir homenaje al artista ourensano por sus cerca de 50 años de trayectoria, que lo han llevado, entre otros méritos y galardones, a pertenecer a la Real Academia Gallega de Bellas Artes.
A tan sólo un año de cumplir los 70, Acisclo se define como 'un escultor que sigue creando y aprendiendo'. Ahora, su muestra se compone de 40 esculturas, en su mayoría de gran formato, pero también existen otras cuatro en miniatura, que enjauladas en vitrinas son de las favoritas del artista, según explicó durante la inauguración.
Entre las novedades de la muestra destaca el hecho de que todas sus obras son creadas a partir de la cerámica, pero también sobresalen las esculturas completamente horizontales que Acisclo realizó, en los últimos años, con el fin de que se mimetizen con el suelo y así parecer, según dijo, 'alfombras y manteles de piedra'.
En la inauguración de la muestra estuvieron presentes distintos cargos políticos de la corporación municipal de la ciudad, como el alcalde, Francisco Rodríguez; el teniente de alcalde, Andrés García Mata; el delegado territorial, Rogelio Martínez, y la concejala de Cultura, Isabel Pérez, así como el director de Relaciones Institucionales de Caixanova en Ourense, Amadeo Rodríguez.
Acisclo se mostró agradecido con el acto, ya que 'además de reencontrarme con viejos amigos, aprovecharé para saber si a la gente le sigue gustando lo que hago'. La larga trayectoria de Acisclo lo convierte en uno de los artistas más relevantes del panorama gallego, sin embargo él resta importancia a este hecho. 'Lo que realmente me importa es seguir disfrutando de lo que hago y tener muchos años más para seguir creando'. Acisclo vive del arte, sí, pero también 'vivo para él', afirma, 'lo malo es cuando pretendes vivir sólo del arte económicamente. He de reconocer que el arte me ayuda a vivir, pero si sólo quisiera vivir de la venta de mis obras, pondría un negocio o una galería, pero a tanto lucro no he llegado', concluye.
La muestra podrá ser visitada en las dos plantas de la sala Caixanova hasta el 18 de abril, de 18 a 21.30 horas de lunes a viernes, y de las 11 a 14 horas y 18 a 21.30 horas, todos los sábados, domingos y festivos.
La exposición pretende rendir homenaje al artista ourensano por sus cerca de 50 años de trayectoria, que lo han llevado, entre otros méritos y galardones, a pertenecer a la Real Academia Gallega de Bellas Artes.
A tan sólo un año de cumplir los 70, Acisclo se define como 'un escultor que sigue creando y aprendiendo'. Ahora, su muestra se compone de 40 esculturas, en su mayoría de gran formato, pero también existen otras cuatro en miniatura, que enjauladas en vitrinas son de las favoritas del artista, según explicó durante la inauguración.
Entre las novedades de la muestra destaca el hecho de que todas sus obras son creadas a partir de la cerámica, pero también sobresalen las esculturas completamente horizontales que Acisclo realizó, en los últimos años, con el fin de que se mimetizen con el suelo y así parecer, según dijo, 'alfombras y manteles de piedra'.
En la inauguración de la muestra estuvieron presentes distintos cargos políticos de la corporación municipal de la ciudad, como el alcalde, Francisco Rodríguez; el teniente de alcalde, Andrés García Mata; el delegado territorial, Rogelio Martínez, y la concejala de Cultura, Isabel Pérez, así como el director de Relaciones Institucionales de Caixanova en Ourense, Amadeo Rodríguez.
Acisclo se mostró agradecido con el acto, ya que 'además de reencontrarme con viejos amigos, aprovecharé para saber si a la gente le sigue gustando lo que hago'. La larga trayectoria de Acisclo lo convierte en uno de los artistas más relevantes del panorama gallego, sin embargo él resta importancia a este hecho. 'Lo que realmente me importa es seguir disfrutando de lo que hago y tener muchos años más para seguir creando'. Acisclo vive del arte, sí, pero también 'vivo para él', afirma, 'lo malo es cuando pretendes vivir sólo del arte económicamente. He de reconocer que el arte me ayuda a vivir, pero si sólo quisiera vivir de la venta de mis obras, pondría un negocio o una galería, pero a tanto lucro no he llegado', concluye.
La muestra podrá ser visitada en las dos plantas de la sala Caixanova hasta el 18 de abril, de 18 a 21.30 horas de lunes a viernes, y de las 11 a 14 horas y 18 a 21.30 horas, todos los sábados, domingos y festivos.
