La ampliación de viaductos y de pasos superiores e inferiores centra las alegaciones del Concello al futuro trazado del AVE, en las que también inciden en que el futuro puente sobre el Miño sea un referente por su diseño y advierten de la necesidad de mantener los enlaces con la actual vía que atraviesa la ciudad para analizar posibles usos en el futuro. Mientras, las alegaciones de Diputación, PP o empresarios tienen como eje central el cambio del paso sobre el Miño y el soterramiento de vías.
Las alegaciones del Concello entran al detalle en el trazado del AVE, proponiendo alternativas en cada punto en el que observan posibles deficiencias. Así, el informe cita varios pasos inferiores y superiores que deberían ampliarse para facilitar la comunicación entre ambas márgenes de la vía, así como la ampliación de los viaductos para una mejor integración visual y accesibilidad territorial. También recomiendan tener en cuenta la necesidad de espacio para futuras ampliaciones de las carreteras sobre las que cruzará el AVE.
En cuestiones más concretas, el estudio aconseja que la salida del túnel de Montealegre se desplace al norte, para reducir el impacto generado entre Os Viros y el río Lonia. Con respecto al futuro viaducto sobre el Miño, los técnicos hacen hincapié en cuidar esmeradamente su diseño. Mientras, el enlace entre el acceso ferroviario desde la Meseta y la vía que va hacia Monforte ocupa una gran superficie (que afecta incluso a las inmediaciones del polígono de O Vinteún), si bien los técnicos creen posible adosar ambas líneas y reducir la ocupación. En este punto, el trazado generaría un efecto barrera entre los barrios superior al actual y piden medidas que lo reduzcan.
Los técnicos municipales plantean también que se mantenga la unión de la actual vía que va a quedar fuera de servicio, tanto con la estación como con la nueva línea en Seixalbo, para su posible uso futuro.
Sobre la estación, los informes municipales indican que la intervención en ella no está incluida en el estudio informativo, pero detectan que en las salidas hacia la Meseta y hacia Santiago no se han tenido en cuenta aspectos que le afectarían, por lo que piden un estudio más profundo.
Otras propuestas
Las alegaciones que presentó la comisión Cámara-CEO no entran en estos detalles, sino que proponen cambiar el trazado para que la salida del túnel de Montealegre sea más al norte y el cruce sobre el Miño se pueda construir aguas arriba de la presa de Velle, con lo que afectaría menos en la zona de Oira y posi bilitaría reducir la cota del terreno para que las vías en la estación estén soterradas.
Las alegaciones de la Diputación coinciden con el planteamiento empresarial. También lo hacen las del PP, aunque aña den otros detalles como la necesidad de reducir el impacto en Seixalbo o en el barrio de A Lonia y pidiendo que el trazado actual pueda reconvertirse para su uso por tranvías y para crear zonas de disfrute ciudadano.
Rechazo a tres depósitos de tierra y protección de pozos
Con respecto a las afecciones medioambientales, los técnicos municipales apuntan que la excavación de túneles supone la generación de un importantísimo volumen de tierras y rechazan tres de los depósitos previstos para el escombro, porque tendrían una importante afectación. Uno de ellos estaría situado bajo el núcleo de Ceboliño y sobre el embalse de Castadón (que suministra agua a Ourense), y los técnicos consideran que es inadmisible por el peligro de contaminación que supone. Mientras, los otros dos se sitúan en zonas paisajísticamente sensibles y en suelos rústicos protegidos.
Por otra parte, los ingenieros municipales apuntan también que la ejecución de los túneles de Montealegre y Bouzachás previsiblemente afectará de forma importante a los aprovechamientos de aguas superficiales y subterráneas de una amplia zona de su entorno (incluyendo núcleos como Santa Mariña, Cotoriño, A Granxa e incluso podrían verse afectados Ceboliño u Os Viros). Por ello, recomiendan realizar un exhaustivo análisis para adoptar las medidas que corresponda para proteger los acuíferos, teniendo en cuenta el precedente de la grave afección que están sufriendo los pozos de la zona de Palmés, también por obras de un túnel del AVE.
En cuestiones más concretas, el estudio aconseja que la salida del túnel de Montealegre se desplace al norte, para reducir el impacto generado entre Os Viros y el río Lonia. Con respecto al futuro viaducto sobre el Miño, los técnicos hacen hincapié en cuidar esmeradamente su diseño. Mientras, el enlace entre el acceso ferroviario desde la Meseta y la vía que va hacia Monforte ocupa una gran superficie (que afecta incluso a las inmediaciones del polígono de O Vinteún), si bien los técnicos creen posible adosar ambas líneas y reducir la ocupación. En este punto, el trazado generaría un efecto barrera entre los barrios superior al actual y piden medidas que lo reduzcan.
Los técnicos municipales plantean también que se mantenga la unión de la actual vía que va a quedar fuera de servicio, tanto con la estación como con la nueva línea en Seixalbo, para su posible uso futuro.
Sobre la estación, los informes municipales indican que la intervención en ella no está incluida en el estudio informativo, pero detectan que en las salidas hacia la Meseta y hacia Santiago no se han tenido en cuenta aspectos que le afectarían, por lo que piden un estudio más profundo.
Otras propuestas
Las alegaciones que presentó la comisión Cámara-CEO no entran en estos detalles, sino que proponen cambiar el trazado para que la salida del túnel de Montealegre sea más al norte y el cruce sobre el Miño se pueda construir aguas arriba de la presa de Velle, con lo que afectaría menos en la zona de Oira y posi bilitaría reducir la cota del terreno para que las vías en la estación estén soterradas.
Las alegaciones de la Diputación coinciden con el planteamiento empresarial. También lo hacen las del PP, aunque aña den otros detalles como la necesidad de reducir el impacto en Seixalbo o en el barrio de A Lonia y pidiendo que el trazado actual pueda reconvertirse para su uso por tranvías y para crear zonas de disfrute ciudadano.
Rechazo a tres depósitos de tierra y protección de pozos
Con respecto a las afecciones medioambientales, los técnicos municipales apuntan que la excavación de túneles supone la generación de un importantísimo volumen de tierras y rechazan tres de los depósitos previstos para el escombro, porque tendrían una importante afectación. Uno de ellos estaría situado bajo el núcleo de Ceboliño y sobre el embalse de Castadón (que suministra agua a Ourense), y los técnicos consideran que es inadmisible por el peligro de contaminación que supone. Mientras, los otros dos se sitúan en zonas paisajísticamente sensibles y en suelos rústicos protegidos.
Por otra parte, los ingenieros municipales apuntan también que la ejecución de los túneles de Montealegre y Bouzachás previsiblemente afectará de forma importante a los aprovechamientos de aguas superficiales y subterráneas de una amplia zona de su entorno (incluyendo núcleos como Santa Mariña, Cotoriño, A Granxa e incluso podrían verse afectados Ceboliño u Os Viros). Por ello, recomiendan realizar un exhaustivo análisis para adoptar las medidas que corresponda para proteger los acuíferos, teniendo en cuenta el precedente de la grave afección que están sufriendo los pozos de la zona de Palmés, también por obras de un túnel del AVE.
