La Xunta está preparando ya las obras de la tercera fase de la circunvalación Este, para lo que ha convocado a los propietarios de 130 fincas para realizar las expropiaciones. Este nuevo vial enlazará Rairo con Seixalbo, dando continuidad a las dos fases anteriores (Os Viros-A Granxa y A Granxa-Rairo) y concluirá conectando Seixalbo con la N-525 y la A-52.
La ejecución de la tercera fase de la circunvalación Este de la ciudad, entre Rairo y Seixalbo (a la altura de Bemposta), requerirá la expropiación de 130 parcelas, cuyos propietarios ya han sido convocados para formalizar los trámites de levantamiento de actas previas de ocupación entre los días 3 y 6 de noviembre, según la resolución que publica ayer el Boletín Oficial del Estado, a instancia de la Xunta. La relación de afectados y los planos correspondientes están expuestos en el Concello de Ourense y en el Servicio Provincial de Infraestructuras (en la calle Saénz Díez de la ciudad). En todo caso, los afectados disponen de un plazo de 15 días hábiles (hasta el 22 de octubre) para formular alegaciones ante el Servicio Provincial de Infraestructuras, aunque sólo con el objeto de subsanar posibles errores en la relación de bienes afectados.
El proceso de expropiación de las fincas se inició ya en 2006, cuando la Xunta declaró la utilidad pública y urgente ocupación de los bienes afectados para la tercera fase de la ronda este. No obstante, la tramitación se mantuvo paralizada hasta ahora, después de que los vecinos de Seixalbo reclamasen que no se ejecutase la obra mientras no se conociese el trazado de la nueva línea de AVE (con la que se cruza esta carretera), que se publicó en septiembre. La construcción de la tercera fase de la circunvalación Este permitirá dar continuidad a las dos primeras, Os Viros-A Granxa y A Granxa-Rairo, ya operativas desde 2003 y 2006, respectivamente, aunque su volumen de tráfico es reducido hasta el momento, debido a que el vial está todavía sin concluir. En todo caso, la circunvalación deberá continuar con una cuarta fase, entre Seixalbo y la carretera N-525, a la altura del enlace sur de la autovía A-52. Una vez esté operativa en su integridad, el nuevo vial permitirá agilizar el tráfico de la zona este de la ciudad.
El proceso de expropiación de las fincas se inició ya en 2006, cuando la Xunta declaró la utilidad pública y urgente ocupación de los bienes afectados para la tercera fase de la ronda este. No obstante, la tramitación se mantuvo paralizada hasta ahora, después de que los vecinos de Seixalbo reclamasen que no se ejecutase la obra mientras no se conociese el trazado de la nueva línea de AVE (con la que se cruza esta carretera), que se publicó en septiembre. La construcción de la tercera fase de la circunvalación Este permitirá dar continuidad a las dos primeras, Os Viros-A Granxa y A Granxa-Rairo, ya operativas desde 2003 y 2006, respectivamente, aunque su volumen de tráfico es reducido hasta el momento, debido a que el vial está todavía sin concluir. En todo caso, la circunvalación deberá continuar con una cuarta fase, entre Seixalbo y la carretera N-525, a la altura del enlace sur de la autovía A-52. Una vez esté operativa en su integridad, el nuevo vial permitirá agilizar el tráfico de la zona este de la ciudad.
