Incumplimiento reiterado de sus funciones y desobediencia grave a las órdenes de un superior. Estas son las dos supuestas faltas muy graves que Xustiza investiga si ha cometido un funcionario del Juzgado de Instrucción número 3, que asume los asuntos de violencia de género. El expediente disciplinario se está tramitando tras una queja del secretario del juzgado. La junta de personal ya ha manifestado su apoyo al trabajador, al que consideran la cabeza de turco ante la situación de colapso del Juzgado.
La Dirección Xeral de Xustiza está tramitando un expediente disciplinario a un funcionario del Juzgado de Instrucción número 3 de Ourense, que asume los asuntos de violencia de género. El procedimiento, que acaba de iniciarse, se basa en una queja del secretario del juzgado en el que manifiesta que advirtió desde hace un tiempo un absoluto descontrol na levanza dos asuntos. La misma queja sostiene que las advertencias al funcionario fueron reiteradas y que una persona de refuerzo lo estuvo ayudando dado el gran número de asuntos que llevaba, si bien desistiu finalmente do seu traballo porque lle resultou imposible axudarlle.
El secretario enumera los expedientes sin tramitar por este funcionario, con gravísimo risco de prescripción de delito. El expediente disciplinario investiga la posible comisión de dos faltas muy graves: incumplimiento reiterado de sus funciones y desobediencia grave a las órdenes de un superior.
El funcionario afectado declinó ayer hacer declaraciones. No obstante, la junta de personal ya ha manifestado su apoyo incondicional al funcionario, que está siendo la cabeza de turco de la grave situación que atraviesa el juzgado y que va a producir una desbandada de funcionarios. Según algunos profesionales de la abogacía, el funcionario en cuestión é moi traballador e non pode pagar os pratos rotos da falta de medios.
El secretario enumera los expedientes sin tramitar por este funcionario, con gravísimo risco de prescripción de delito. El expediente disciplinario investiga la posible comisión de dos faltas muy graves: incumplimiento reiterado de sus funciones y desobediencia grave a las órdenes de un superior.
El funcionario afectado declinó ayer hacer declaraciones. No obstante, la junta de personal ya ha manifestado su apoyo incondicional al funcionario, que está siendo la cabeza de turco de la grave situación que atraviesa el juzgado y que va a producir una desbandada de funcionarios. Según algunos profesionales de la abogacía, el funcionario en cuestión é moi traballador e non pode pagar os pratos rotos da falta de medios.
