Aunque parezca sacado del argumento de la película Inteligencia Artificial, ya es una realidad.
Una pareja de británicos, dueños de una compañía de juguetes llamada Conceptioneering, llevan cuatro años trabajando en un robot de compañía. Su nombre es Aimec, acrónimo de Artificially Intelligent Mechanical Electronic Companion, y puede reír, hacer bromas, cantar, hablar, roncar y muchas más características que lo harán pasar por un niño. También es capaz de conectarse con dispositivos del hogar para encender y apagar las luces o la televisión, y puede conectarse a internet a través de una red Wifi para buscar cosas que no entienda e informarse. Responde a órdenes verbales, es capaz de moverse libremente gracias a su ojo-cámara y tiene también sensores de movimiento, por lo que si detecta a alguien cerca de él, hará un chiste.
Su padre está muy orgulloso de él: 'me lee los correos y me pone música' afirma Ellis, o 'mira la guía de televisión y me pone lo que cree que me puede interesar'. También asegura que puede hacer trabajos manuales, 'es muy bueno regando las plantas'.'Dentro de 10 años, todos los hogares tendrán un robot. Ayudarán a cortar el césped, hacer la comida o limpiar la casa. Las aplicaciones potenciales son infinitas', afirma el inventor.
Todavía no está a la venta, pero la pareja británica espera tenerlo en tiendas antes de dos años a un precio aproximado de 250 euros.
Su padre está muy orgulloso de él: 'me lee los correos y me pone música' afirma Ellis, o 'mira la guía de televisión y me pone lo que cree que me puede interesar'. También asegura que puede hacer trabajos manuales, 'es muy bueno regando las plantas'.'Dentro de 10 años, todos los hogares tendrán un robot. Ayudarán a cortar el césped, hacer la comida o limpiar la casa. Las aplicaciones potenciales son infinitas', afirma el inventor.
Todavía no está a la venta, pero la pareja británica espera tenerlo en tiendas antes de dos años a un precio aproximado de 250 euros.
