Las becas y ayudas al estudio son uno de los instrumentos más eficaces para lograr el principio de igualdad de oportunidades, según el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte (MECD).
Cada año, el Ministerio concede diversas modalidades de becas destinadas a cubrir cada uno de los ciclos educativos.
Dentro de las Enseñanzas no universitarias, el MECD otorga becas para los ciclos de Primaria y Secundaria, Bachillerato, Formación Profesional (FP), Enseñanzas Artísticas, Enseñanzas Deportivas, Idiomas, Estudios militares y religiosos
Para los estudios universitarios, las becas se destinan a los estudios de grado, de máster y de doctorado.
El Gobierno, a propuesta del ministerio que dirige José Ignacio Wert, aprobó el 2 de agosto de 2013 el real decreto que modifica el sistema de becas, vigente para este curso de 2013-2014.
El nuevo decreto establece un núcleo o parte fija de ayudas y una cuantía variable, que se calcula teniendo en cuenta la renta familiar y el rendimiento académico del alumno, con el objetivo de que a mejores notas y menor renta, mayor cuantía recibe el estudiante.
Este aspecto, así como las notas mínimas exigidas, es lo que provocó las mayores críticas y reacciones de la comunidad educativa.
Para la parte fija de la beca o núcleo básico, el decreto prevé cantidades que garantizan el derecho a la educación a las rentas más bajas, una cuantía por residencia para desplazamientos y exención de precios públicos.
En función de lo anterior, corresponde a los alumnos universitarios, teniendo en cuenta cada uno de los tres umbrales que establece el decreto, cuantías que van desde 1.500 euros en función de la renta; 1.500 por residencia y una cantidad variable mínima de 60 euros, así como la beca de matrícula en los tres casos.
Mientras, para los alumnos no universitarios, las becas contemplan cantidades que, teniendo también en cuenta los tres umbrales, van desde los 1.500 euros ligados a la renta, los 1.500 a la residencia y hasta la ayuda básica de 200 euros.
Los requisitos académicos que establece la nueva normativa para acceder a las ayudas universitarias son de un 5,5 para la beca de matrícula del primer curso, anteriormente eran de un 5; y de 6,5 para el resto.
Para el segundo curso universitario y posteriores, el alumno debe superar un porcentaje de créditos que va desde el 65 al 90 por ciento, dependiendo del área de enseñanza, para la beca de matrícula.
Para el resto de cuantías, el estudiante debe superar entre el 85 y el 100 por ciento de los créditos, según la rama de estudios, o bien obtener una nota media de entre 6 y 6,5 puntos, llegando hasta los 7 puntos para el caso de los máster.
Los estudiantes de enseñanzas no universitarias deben obtener para acceder a la ayuda en el primer curso una nota media de un 5,5 en ESO, FP de Grado Superior y bachillerato.
En los siguientes, los alumnos pueden tener un suspenso o bien superar el 85 % de las horas en las enseñanzas que se organicen por módulos.
Según los datos aportados ayer por la secretaria de Estado de Educación, FP y Universidades, Montserrat Gomendio, ha subido la cantidad media en las becas en Secundaria, Bachillerato y FP de 1.326 euros a 1.482 euros (156 euros más), pero ha bajado el número de alumnos becados, de 336.066 a 313.391 (22.675 menos).
Los universitarios becados este curso han recibido de media 2.824 euros frente a los 3.101 euros del pasado, lo que significa que han recibido de media 277 euros menos, porque ha aumentado el número de beneficiarios, de 291.230 a 322.000 (hay 30.770 alumnos becados más este año).
Además de las anteriores, el MECD concede ayudas económicas para los alumnos que se acojan al programa Erasmus de intercambio de estudiantes en Europa.
El Ministerio de Educación financiará 10.000 becas (la UE lo hará para otras 30.000) de estudiantes españoles, para las que exigirá al alumno un nivel de idioma B-2 o equivalente y tener aprobados un mínimo de 60 créditos en la carrera.
Esos alumnos de Erasmus.es recibirán de media al mes 350 euros frente a los 250 euros de los erasmus españoles financiados por Bruselas.
Asimismo, las comunidades autónomas, con competencias en materia educativa, ayuntamientos y otras instituciones, complementan el sistema de becas para posibilitar los estudios con partidas dirigidas a alquiler de viviendas, compra de libros y/o material escolar, préstamos a bajo interés, entre otros.
