Una organización no gubernamental de la lucha anti-tabaco exigió que la marca de cigarrillos más famosa de Pekín deje de llamarse como la sede del gobierno comunista, Zhongnanhai, para no alentar a los fumadores.
Usar el nombre de un lugar sagrado como hace esta marca está confundiendo a los consumidores, señaló Wu Yiqun, subdirectora de la ONG pequinesa Centro de Investigación para el Desarrollo de la Salud, citado por el diario China Daily.
Los compradores creen que esta marca tiene el reconocimiento del gobierno central, y se ve como un símbolo de gran calidad y autoridad, señaló la subdirectora.
Zhongnanhai es una de las mayores marcas de cigarrillos de China, valorada en 1.100 millones de dólares (825 millones de euros) el año pasado.
Además del peligro de alentar a los potenciales fumadores en un país en el que 300 millones de chinos fuman tabaco, el uso de la secretista sede del gobierno podría estar también infringiendo la Ley de Marcas.
Según el artículo 10 de esa regulación, que fue revisada en 2001, los nombres de las oficinas centrales del gobierno no pueden ser usadas como marca, señaló el abogado Huang Jinrong.
Sin embargo, en 2006 el Buró de Marcas de Pekín permitió que la Factoría de Cigarrillos de Pekín continuara usando el nombre Zhongnanhai desde 2007 y hasta 2017.
Las dudas sobre los cigarrillos Zhongnanhai atenazan a algunos miembros del órgano consultivo, que han pedido en vano a la cúpula que exija la retirada de esa marca.
Analistas de mercado señalan que, en caso de que la marca se anulara, la firma perdería cientos de millones de yuanes.
La ONG denunciante señala también que la firma de cigarrillos miente a los consumidores cuando anunció que parte de sus beneficios estaban destinados a un famoso programa de caridad o intenta convencer de que los productos bajos en nicotina no dañan la salud.
Los compradores creen que esta marca tiene el reconocimiento del gobierno central, y se ve como un símbolo de gran calidad y autoridad, señaló la subdirectora.
Zhongnanhai es una de las mayores marcas de cigarrillos de China, valorada en 1.100 millones de dólares (825 millones de euros) el año pasado.
Además del peligro de alentar a los potenciales fumadores en un país en el que 300 millones de chinos fuman tabaco, el uso de la secretista sede del gobierno podría estar también infringiendo la Ley de Marcas.
Según el artículo 10 de esa regulación, que fue revisada en 2001, los nombres de las oficinas centrales del gobierno no pueden ser usadas como marca, señaló el abogado Huang Jinrong.
Sin embargo, en 2006 el Buró de Marcas de Pekín permitió que la Factoría de Cigarrillos de Pekín continuara usando el nombre Zhongnanhai desde 2007 y hasta 2017.
Las dudas sobre los cigarrillos Zhongnanhai atenazan a algunos miembros del órgano consultivo, que han pedido en vano a la cúpula que exija la retirada de esa marca.
Analistas de mercado señalan que, en caso de que la marca se anulara, la firma perdería cientos de millones de yuanes.
La ONG denunciante señala también que la firma de cigarrillos miente a los consumidores cuando anunció que parte de sus beneficios estaban destinados a un famoso programa de caridad o intenta convencer de que los productos bajos en nicotina no dañan la salud.
