El rey ya abandonó la UCI y pudo sentarse, pero aún no logró caminar

El rey abandonó antes de mediodía la Unidad de Cuidados Intensivos y comenzó a recuperarse satisfactoriamente de la operación de cadera a que se sometió en el Hospital Quirón, acompañado por la reina, los príncipes de Asturias y las infantas Elena y Cristina, que viajó desde Ginebra.
El rey estuvo sentado en la habitación, según explicó la reina tras pasar junto a él casi ocho horas en el centro sanitario, aunque no había empezado a caminar por la habitación como sugería el martes el doctor Cabanela, podría empezar a hacer, y tal como confirmaba doña Sofía al precisar, con una sonrisa: 'Todo a su paso'.

El cirujano, Miguel Cabanela, sugirió la conveniencia de que empezase a caminar con andador o con dos muletas si tenía 'humor para levantarse', si bien, en todo caso, el primer parte médico destacaba ayer que don Juan Carlos presentaba una evolución 'altamente satisfactoria' y se encontraba 'cómodo y con muy buen estado de ánimo'.

También pasaron ayer por el centro los príncipes de Asturias -que permanecieron una hora- en el centro. El heredero de la corona señaló que su padre estaba 'muy bien, muy animado', se mostraba 'interesado por todo' e incluso le vio 'con ganas de ponerse de pie en cuanto los médicos se lo permitan'. 'Está claro que está muy bien', insistió, si bien matizó que, como suele ser habitual después de una intervención quirúrgica, no pasó una buena noche como paciente'.

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