Los proyectos de parques eólicos que afectan a la provincia no disgustan, al menos inicialmente, a las comunidades de montes vecinales en mano común que gestiona la Asociación Agrogandeira do Macizo Central (Agromacen). Todo lo contrario, el presidente del colectivo que asesora en materia forestal a a 47 de estas entidades plantea que "poderían vir recursos para os pobos e que teñan ingresos económicos", según comentó Pedro Rodríguez Parente.
En estos momentos, son cuatro los proyectos eólicos que afectan a la provincia de Ourense: Barjas (ubicado en la provincia de León, pero con la línea de evacuación sobre Valdeorras y Trives: 22 aerogeneradores y 121 megavatios), Prada (Carballeda, O Barco y A Veiga y también con la línea de evacuación sobre Valdeorras y Trives: 31 aerogeneradores y 170,5 MW), Alto Cabrera (cuatro concellos leoneses, Carballeda y Rubiá: 29 aerogeneradores y 144 MW), y Rebordechao (Laza, Maceda y Vilar de Barrio: 28 aerogeneradores y 154 MW).
El portavoz de las aludidas comunidades de montes se mostró muy crítico con los alcaldes que aunciaron públicamente su oposición a los proyectos: "Hai alcaldes que, de repente, din que non se van facer, cando deberán dar licencia de actividade ou de obras" y, seguidamente, añadió que desde hace 70 años que no tienen ningún poder de decisión sobre los montes comunales. "Son xestores dos recursos municipais, pero non xestores dunha propiedade", apuntó.
Rodríguez Parente también reprochó a los alcaldes que compartiesen la oposición que los proyectos están encontrando en diferentes colectivos del oriente provincial, como los ecologistas de la Sociedade Galega de Historia Natural (SGHN) o Adega. "Estamos de acordo en que non se fagan en zonas de protección, como Rede Natura, pero os alcaldes non deben facer seguidismo, deben defender aos pobos", añadió.
Pedro Rodríguez explicó que los parques eólicos que están funcionando en el Macizo Central abonan actualmente 2.500 euros por megavatio y año.
